El tejido productivo chino está comenzando a entrar en un círculo vicioso por culpa de la elevada deuda que está provocando que las empresas se retrasen en el pago a proveedores y aumente el riesgo de quiebra por los problemas de liquidez. Según Euler Hermes, la mayor aseguradora de crédito del mundo, la insolvencia de […]
Dirigentes Digital
| 21 mar 2016
El tejido productivo chino está comenzando a entrar en un círculo vicioso por culpa de la elevada deuda que está provocando que las empresas se retrasen en el pago a proveedores y aumente el riesgo de quiebra por los problemas de liquidez. Según Euler Hermes, la mayor aseguradora de crédito del mundo, la insolvencia de deuda corporativa se incrementó un 25% en 2015. Uno de los problemas que está afrontando el sector privado es el retraso por parte de la administración, que se está extendiendo desde el sector industrial al tecnológico. La firma calcula que en los dos últimos años los retrasos se han incrementado un 23% hasta los 600 millones de dólares. Cada vez es más complicado para las empresas cobrar los atrasos. Las dificultades del sector privado chino han sido reconocidas por el gobernador del Banco Central Chino, Zhou Xiaochuan, que apunta al alto endeudamiento de las empresas como el principal problema. Según la entidad, la deuda privada alcanza el 160% del PIB. La mayor parte corresponde a préstamos corporativos. Los sectores más afectados son los industriales como el del cemento, acero, carbón y vidrio.