La economía española está a pleno rendimiento, con una velocidad de crucero de casi el 4%, en términos anualizados, pero se acercan curvas para los próximos trimestres con un previsible estancamiento de la economía global y la antesala de las elecciones generales que provocará cierto grado de incertidumbre en la inversión. Por todo ello, los […]
Dirigentes Digital
| 05 ago 2015
La economía española está a pleno rendimiento, con una velocidad de crucero de casi el 4%, en términos anualizados, pero se acercan curvas para los próximos trimestres con un previsible estancamiento de la economía global y la antesala de las elecciones generales que provocará cierto grado de incertidumbre en la inversión. Por todo ello, los expertos del servicio de estudios de BBVA opinan que la economía española se desacelerará en el tercer trimestre varias décimas. En concreto, creen que el crecimiento trimestral será del 0,7% frente al 0,9% del primer trimestre y del 1% del segundo. "Las cifras de gasto que se van conociendo apuntan ya a una desaceleración que se espera se consolide durante el segundo semestre del año, en línea con el escenario presentado hace tres meses. En todo caso, y por el momento, dicha desaceleración está siendo de menor intensidad de lo que se , indican en un reciente informe.
Los principales factores que explican el pequeño frenazo son "la baja de las expectativas de crecimiento tanto de las economías desarrolladas como de las emergentes y el aumento de las tensiones financieras durante las negociaciones entre Grecia y las Instituciones". En el análisis se destaca que la economía española se sigue aprovechando de los vientos de cola, tipos bajos y precio del petróleo a la baja; pero además de una política fiscal "muchos más expansiva" de lo esperado. La reforma fiscal está evitando que el parón sea mucho mayor.
Pero los economistas de BBVA alertan de varios factores preocupantes para la economía. El primero, es la probabilidad de que se cumplan el objetivo de déficit del 4,2% del para 2015 dada "la ejecución presupuestaria de las AA. PP. en los primeros cinco meses del año". Admiten que la potencial desviación no parece todavía importante, pero "hay que recordar que uno de los principales activos de la economía española durante los últimos años ha sido su capacidad de reducir el déficit público". La "credibilidad" sobre las cuentas públicas es clave para mantener "el coste de financiación de una economía excesivamente endeudada con el exterior", comentan los expertos.
La otra preocupación es la deriva política a cinco meses de las elecciones generales. "Si a la anterior incertidumbre sobre la política fiscal se añaden las dudas que pudieran surgir sobre el resto de las medidas que se implementarán durante los siguientes años, la vulnerabilidad de la economía española se incrementaría considerablemente", según BBVA, que recomienda que "se aprovechen estos últimos meses de legislatura para tomar las medidas necesarias que garanticen el cumplimiento de la meta de déficit y continuar con las reformas que hagan que el proceso de consolidación fiscal sea más virtuoso y menos doloroso".
Las advertencias y las previsiones a corto plazo no son óbice para el departamento haya revisado marginalmente al alza la previsión de crecimiento del PIB de España para 2015 hasta el 3,2% y mantener la de 2016 en el 2,7% y pensar que con este escenario se podría dar lugar a una creación neta de empleo en torno al millón de puestos de trabajo al final del periodo, con una tasa de paro cercana al 20% a finales de 2016.