Tras casi un año de pandemia, la asfixia financiera por la que atraviesan los autónomos queda reflejada en su pérdida de músculo empleador. Según un informe publicado por ATA, el número de autónomos con asalariados a su cargo ha caído en 26.243 durante 2020, con una bajada del 6,1%. Esta situación contrasta con el aumento […]
AutónomosDirigentes Digital
| 17 feb 2021
Tras casi un año de pandemia, la asfixia financiera por la que atraviesan los autónomos queda reflejada en su pérdida de músculo empleador. Según un informe publicado por ATA, el número de autónomos con asalariados a su cargo ha caído en 26.243 durante 2020, con una bajada del 6,1%. Esta situación contrasta con el aumento de los autónomos persona física sin empleados con un crecimiento del 2%, que se traducen en 31.777 y pone en evidencia la mala evolución de muchos negocios en un año para el olvido.
El descenso es más significativo cuando se analizan los puestos de trabajo destruidos por esta parte del tejido patrio. Los autónomos persona física han pasado de emplear a un total de 877.208 personas en diciembre de 2019, a tener 807.251 personas a cierre de 2020. Así, en tan solo un año, descienden en casi 70.000 personas los trabajadores contratados por autónomos.
En base a los datos publicados por el Ministerio de Trabajo y Economía Social, la organización destaca que, de los dos millones de autónomos persona física, tan solo uno de cada cinco tiene (22,2%), como mínimo, una persona a su cargo. En este sentido, aquellas plantillas formadas por cinco o más trabajadores han sido las más perjudicadas. De hecho, en este tramo el número medio de asalariados descendió un 12,6%.
A este respecto, otro de los datos más llamativos es la reducción experimentada en la cantidad de autónomos societarios, con 3.421 bajas, mientras que en el balance del año suben las personas físicas autoempleadas (+5.534). En conjunto, de los casi 3,27 millones que cotizan en el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA), más de 1,25 millones están inscritos en el primero y los dos millones restantes en el segundo.
En este contexto, los emprendedores nacidos fuera de España y dados de alta en el RETA han protagonizado el aumento de autónomos persona física en 2020, hasta un 7,5%, que se traduce en 17.228 nuevos extranjeros más. Por su parte, los de nacionalidad española descienden un 0,7%, que supone 11.694 autónomos menos que al inicio del ejercicio.
La pandemia frena a las mujeres a la hora de montar un negocio. El citado documento recoge que, de los 5.534 autónomos persona física que sumó el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA) en 2020, casi la práctica totalidad (97,7%) fueron varones. El sistema apenas contabilizó 127 altas por parte de ellas.
“Solo podemos decir que la situación es realmente preocupante”, subraya Lorenzo Amor, quien hace hincapié en la bajada registrada de los autónomos con pluriactividad. En concreto, únicamente el 6,2% del total compagina la realización de actividades por cuenta propia y ajena, rompiendo con la tendencia ascendente que venía registrando en los meses anteriores.
El grueso de los que se decantan por esta fórmula de empleo (76,6%) tiene más de 40 años, siendo la franja que va de los 40 a los 54 años la más numerosa, con casi el 50% del total. En el lado opuesto, únicamente un 2% son menores de 25 años, mientras que aquellos con más de 55 repuntan hasta los 14.591 cotizantes. “Se hace necesario actuar ya. No dejar pasar ni un día más y establecer ayudas directas a los sectores más castigados”, concluye Amor, al tiempo que alerta de que “nos enfrentamos a un año catastrófico para el empleo y el conjunto empresarial”.