Nigeria, la mayor economía de África, tiene un agujero en sus cuentas públicas de 15.000 millones de dólares. Los ingresos del petróleo suponen más de 90% de sus ingresos en divisas y su presupuesto depende directamente del precio del petróleo. La caída de los últimos meses supone una seria amenaza para el país que acaba […]
Dirigentes Digital
| 01 feb 2016
Nigeria, la mayor economía de África, tiene un agujero en sus cuentas públicas de 15.000 millones de dólares. Los ingresos del petróleo suponen más de 90% de sus ingresos en divisas y su presupuesto depende directamente del precio del petróleo. La caída de los últimos meses supone una seria amenaza para el país que acaba de pedir al Banco Mundial un préstamo urgente por importe de 3.500 millones de dólares, según Finnancial Times.
Nigeria no es el único país que sufre por culpa del petróleo. Azerbaiyán impuso en diciembre una serie de controles para frenar la salida de capitales y sostener su moneda, pero también está en negociaciones con el Banco Mundial y el FMI para obtener financiación. Un portavoz del FMI se encuentra en estos momentos en Azerbayán para analizar in situ las necesidades de financiación del país, según informa Reuters. Por su parte, Financial Times señala que los representantes del FMI y el Banco Mundial discuten sobre una línea de préstamos de emergencia por unos 4.000 millones de dólares.
Otro país que tiembla a la espera de un posible pacto para reducir la producción y estabilizar los precios es Brasil con su petrolera de referencia, Petrobras, como la más endeudada de las petroleras mundiales.
En la lista está también Ecuador, un país dependiente del petróleo al igual que Rusia y Kazajastán. Éstos últimos, sin embargo, cuentan con reservas suficientes para hacer frente al corto plazo. Lejos de una situación de rescate pero sí con una economía tocada por la caída del crudo están Noruega o Canadá.