Chile: La sombra de la corrupción

Aún en los tiempos de auge de las materias primas que vivió Sudamérica en la última década, Chile aparecía como una economía estable y responsable. De hecho, es uno de los países menos expuestos a los efectos del fin de esa época dorada, de acuerdo con una evaluación del Banco Mundial (BM) para América Latina.

"Chile mantuvo la prudencia macroeconómica y enfrenta una situación menos exigente que aquellos que gastaron demasiado y economizaron poco", señaló recientemente Augusto de la Torre, economista jefe del BM, durante una rueda de prensa en Washington. Esos otros países, como Venezuela, Brasil y Argentina, tienen menos margen de maniobra y se enfrentan un período de menor crecimiento -y hasta recesión-, con complicados cuadros de transición política.

Buenas noticias y no tan buenas

Entre las buenas noticias de 2015 que tuvo la República de Chile, gobernada por la socialista Michelle Bachelet en segundo mandato presidencial, una fue el crecimiento económico de 2,1%, lo que representó dos puntos arriba del resultado del año anterior.

A efectos comparativos, Brasil tuvo en el mismo período una contracción del 3,8% de su PIB, una desaceleración cuyos efectos vienen expandiéndose a los países vecinos, entre los cuales Chile aparece, no obstante, con más inmunidad al contagio.

Otra buena noticia para los chilenos fue que el país ocupó el segundo lugar en la medición que realiza anualmente Transparencia Internacional para identificar la percepción de corrupción. Fue una buena noticia, aunque no tan buena como en 2014, cuando había ocupado el primer lugar. Es decir, cuando era visto como el país menos corrupto de la región.

Las revelaciones de prácticas reñidas con la ética comenzaron en 2015 y fueron ampliándose hasta llegar en abril de este año a involucrar a más figuras del Gobierno y del empresariado, inclusive con su mención en los Papeles de Panamá. En esa escalada, ya renunciaron a cargos en el Gobierno el hijo de la presidenta Michelle Bachelet, el titular de la Casa de la Moneda y ahora aparecen imputados la nuera de la mandataria y otras 12 personas.

Hacia afuera del país, la Sociedad Química Minera de Chile (SQM) es la empresa que vincula a Chile con el torbellino de escándalos que atormentan a Brasil a partir del descubrimiento de una gran trama en la estatal Petrobras.

¿El cambio de escenario?

El surgimiento de esas informaciones, que contradicen el perfil ético irreprochable anterior, coincide con las noticias sobre un cambio también en la trayectoria de los índices económicos.

Así, el propio Banco Central del país recortó a fines de marzo su cálculo de crecimiento económico para 2016, que pasó de un rango de entre el 2% y el 3% a una expectativa situada entre el 1,25% y el 2,25%. "La eco- El Ba nco Mundial, el FMI, S&P y Fitch han rebajado sus perspectivas de crecimiento para Chile nomía se crecerá por debajo de su potencial durante buena parte del horizonte de proyección", dijo la entidad. Para 2017, proyectó un aumento de entre el 2% y el 3%.

En esa misma línea se pronunció el Fondo Monetario Internacional (FMI), que viene rebajando reiteradamente desde abril de 2015 sus pronósticos de crecimiento debido a la la debilidad interna y la caída en el precio del cobre (del que Chile es el principal productor mundial). Pasando del 3,3% hace un año al 2,9% en octubre, el organismo volvió a rebajar en enero de 2016 sus estimaciones de crecimiento para este año, fijando ahora una expectativa del 2,1%.

Tras conocerse esa proyección, el ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés, dijo que la rebaja "confirma que requerimos especiales esfuerzos en manejar la economía y la agenda de cambios de manera de poder revivir lo más rápido posible la fortaleza del crecimiento".

Puede leer el reportaje completo en la revista DIRIGENTES del mes de junio, ya en su quiosco.