Las redes sociales se han convertido en un importante prescriptor para aquellos que deciden realizar un viaje. Esta es una de las conclusiones del informe El viajero digital elaborado por Deloitte y Facebook. La presencia de las redes sociales en la vida de los consumidores es cada vez mayor. Además, la presencia en las redes sociales de las […]
Dirigentes Digital
| 23 mar 2015
Las redes sociales se han convertido en un importante prescriptor para aquellos que deciden realizar un viaje. Esta es una de las conclusiones del informe El viajero digital elaborado por Deloitte y Facebook. La presencia de las redes sociales en la vida de los consumidores es cada vez mayor.
Además, la presencia en las redes sociales de las empresas introduce cuestiones como la necesidad de cuidar la reputación online o lacreación de nuevos canales de comunicación con los consumidores. Por ello, la inversión de las empresas en el entorno digital crece cada año.
Así, el 70% de las empresas aumentarán su presupuesto en redes sociales, según datos recogidos por The Word of Mouth Marketing Association. "Las redes sociales nos han hecho darnos cuenta de que el pueblo tiene voz, y a través de la democratización de contenidos e ideas podemos, una vez más, unirnos alrededor de pasiones comunes, inspirar movimientos y provocar el cambio", apunta Brian Solis analista digital y autor de "La guía completa para marcas y empresas para construir, cultivar, y medir el éxito en la nueva web.
Nuevos clientes
Las empresas han dejado de poder clasificar a los clientes en segmentos de mercado estancos. Ahora el cliente tiene múltiples prismas, tantos como cada una de las características de cada viaje que realice.
Es esencial adaptarse a un nuevo perfil de viajero: más experimentado, con más conocimiento, más exigente y que pretende "tener una experiencia de viaje". Y es necesario conocer los distintos segmentos/ mercados existentes.
El consumidor se vuelve cada vez más racional al comprar. A pesar de la parte emocional que existe a la hora de planificar un viaje, la parte racional se impone en las decisiones. Las empresas deben ofrecer ventajas competitivas medibles que faciliten el proceso de racionalización de la compra para que el consumidor pueda identificarse con los valores de marca. Un 50% de los clientes están dispuestos a pagar más por productos que apoyen causas sociales.