Pero además de la luz, los países en desarrollo están luchando con muchos otros problemas que los investigadores y las empresas de tecnología están tratando de abordar. Mayor seguridad alimentaria y acceso mejorado al aire y agua limpios son solo algunos ejemplos de las áreas identificadas en las tecnologías que destacarán para 2020, de acuerdo […]
Dirigentes Digital
| 06 ene 2015
Pero además de la luz, los países en desarrollo están luchando con muchos otros problemas que los investigadores y las empresas de tecnología están tratando de abordar. Mayor seguridad alimentaria y acceso mejorado al aire y agua limpios son solo algunos ejemplos de las áreas identificadas en las tecnologías que destacarán para 2020, de acuerdo con una lista publicada por el Foro Económico Mundial. SciDev.Net ha consultado a algunas de las empresas de esta lista para vaticinar qué podría aportar el sector de la tecnología a los países en vías en desarrollo en 2015 que comienza.
Robots limpiadores de paneles solares
Eran Meller, CEO de Ecoppia, ha afirmado que el mercado para paneles solares está madurando y tiene oportunidades en regiones desérticas ricas del Medio Oriente, India y Sudamérica. Desafortunadamente, estas áreas también son propensas a frecuentes tormentas de polvo. El polvo puede reducir la efectividad de estos paneles hasta en un 60%, reduciendo significativamente los beneficios económicos de la energía solar.
Los actuales métodos de limpieza de paneles solares son intensivos y requieren una significativa cantidad de agua: limpiar una instalación de 100 megavatios, por ejemplo, puede gastar cerca de 420 millones de litros de agua a lo largo de la vida útil del proyecto. En el 2015, veremos un aumento en las tecnologías para la limpieza, innovadoras y libres de agua, que se basan en robots en vez de mano de obra, y protegen el suministro de agua mundial a favor de las comunidades y las cosechas que más lo requieran.
Purificación autoalimentada del agua
Matthew Silver, CEO de Cambrian Innovation, comenta por su parte que el 40% de la población mundial padece escasez de agua. Esto se siente mucho más en el mundo en desarrollo, donde la carencia de infraestructura ha conllevado a la falta de acceso al agua potable, limpia y utilizable. Las compañías pioneras están respondiendo a esta necesidad. Se espera que los sistemas de purificación de agua autoalimentados empiecen a afianzarse en el mundo desarrollado en el 2015. Un ejemplo es la solución biotecnológica avanzada de Cambrian Innovation, EcoVolt, que puede limpiar de modo rentable el agua contaminada al tiempo que genera biogás renovable, recuperando así una valiosa fuente de energía que de lo contrario sería descartada.
Mejorar la calidad del aire
Rick Tutkowski, CEO de ClearSign, ha dicho que las máscaras quirúrgicas y los inhaladores antiinflamatorios están convirtiéndose en accesorios necesarios alrededor del mundo. Cuando vemos las cifras más recientes de la Organización Mundial de la Salud, queda claro que es necesario hacer frente a la calidad del aire. Desafortunadamente, algunas de las mayores fuentes de contaminación son los sistemas que impulsan nuestra vida diaria. La combustión de hidrocarburos en calderas, hornos y turbinas crea agentes contaminantes como óxidos de nitrógeno, monóxido de carbono y partículas.
En el 2015 veremos innovaciones tecnológicas diseñadas para alcanzar los objetivos ambientales en formas más prácticas, ahora y en el futuro. Con el propósito de reducir económicamente la formación de contaminantes, estas tecnologías emergentes son la clave para ayudar a que los cuerpos reguladores y las organizaciones industriales se vean cara a cara por primera vez. Desde los líderes manufactureros como China y México, hasta las naciones ricas en petróleo del Medio Oriente, encontrar una solución de bajo coste y alto impacto para el control de la contaminación del aire.
Reciclar agua del ‘fracturamiento’
Por último, Riggs Eckelberry, CEO de OriginOil, ha confirmado que el tratamiento y reutilización del agua empleada en el fracturamiento está lista para despegar en Estados Unidos, donde el mercado se triplicará hasta el 2020. Sin embargo, estamos viendo tasas de adopción aún más explosivas en países en desarrollo ricos en petróleo, que están empezando a hacer fracturas hidráulicas (frack, en inglés). Este es el caso de Omán, por ejemplo, donde se requiere que las grandes petroleras observen las nuevas regulaciones rigurosas a medida que el fracking empieza en la región. En el 2015, veremos que la fracturación hidráulica continuará desarrollándose en el mundo en desarrollo. Esto se complementará con el tratamiento y reutilización del agua, que mitigará en gran medida el efecto de esta práctica en poblaciones y ecologías en las regiones en desarrollo.