La escalada de tensión entre los dos países crece. El Ministerio de Interior ha anunciado que desplegará sistemas de misiles antiaéreos S-400 en la base aérea siria de Jmeimim, a 30 kilómetros de la frontera con Turquía, donde tiene emplazados los aviones que participan en la misión antiterrorista en Siria. Las baterías de misiles S-400, […]
Dirigentes Digital
| 25 nov 2015
La escalada de tensión entre los dos países crece. El Ministerio de Interior ha anunciado que desplegará sistemas de misiles antiaéreos S-400 en la base aérea siria de Jmeimim, a 30 kilómetros de la frontera con Turquía, donde tiene emplazados los aviones que participan en la misión antiterrorista en Siria.
Las baterías de misiles S-400, garantiza el derribo de objetivos aéreos a una distancia de 250 kilómetros y de misiles balísticos no estratégicos a 60 kilómetros, con lo que el territorio turco queda al alcance del armamento ruso.
Además, el Kremlin ha anunciado que aviones caza escoltarán a los bombarderos que actuaban en la zona. El acorazado "Moskvá", buque insignia de la flota rusa del mar Negro, navegará en la zona costera cercana a Latakia para apoyar con sus baterías antiaéreas Fort, similares a los S-400, las misiones de la agrupación aérea rusa que actúa en Siria.
Tras el incidente, Turquía acusó a Rusia de invadir su espacio aéreo y elevó el caso al consejo de la OTAN, que se reunió ayer de urgencia para respaldar a su aliado y pedir calma a los dos países. Putin fue muy duro con Turquía después de asegurar que el avión ruso no sobrevoló el espacio turco. "Después de lo sucedido ayer, no podemos descartar otros incidentes, y si éstos tienen lugar, reaccionaremos de una u otra forma", dijo el presidente ruso que acusó a Turquía de ser cómplice de los terroristas.