¿Cómo es posible, que primero Emilio Botín, y luego Ana Patricia Botín, controlen con mano de hierro uno de los mayores bancos de Europa, cuando la familia apenas tienen un 0,77% de capital de la entidad? Recientemente, hemos visto como otra de las fortunas ilustres de España perdía el timón de FCC con una participación en la empresa que supone un cuarto de la base accionarial. Los Botín han gestionado el banco hasta convertirlo en uno de los más importantes del mundo, tomando decisiones claves sin ninguna oposición, como se ha visto en el tema sucesorio. Y todo ello sin ser los dueños del banco.
Y entonces quiénes son los principales accionistas de Santander. Nombres como State Street Bank, Chase Nominees o Guaranty Nominees no suenan a la opinión pública, pero son los socios mayoritarios desde hace años. Los propietarios de los mayores paquetes accionariales. Algunos con participaciones que superan el 11%, como es el caso de como State Street Bank, que le daría derecho a sentarse en el consejo de administración, pero son bancos custodios, intermediarios financieros que se encargan de guardar las acciones de tercero.
Actúan como depósitos de acciones. Fondos o grandes fortunas ceden a estas entidades su participación. Ellas se encargan de salvaguardarlas gestionando las acciones con el cobro de dividendo o venta y compra. Con motivo de la macro ampliación, el banco ha revelado las posiciones más significativas. A fecha de cierre de 2014 los únicos titulares que figuraban en el registro del Banco con una participación del 3% eran State Street Bank (11,43%), Chase Nominees (5,78%), BNY Mellon (4,8%), EC Nominees (4,35%), Guaranty Nominees (4,21%) y Clearstream Banking (3,47%). Desde Santander explican que el banco no está controlado, directamente o indirectamente, por ninguna entidad y que estos paquetes de acciones son fruto de que grandes fondos de inversión depositan sus acciones en estas firmas.
En ningún caso, los bancos custodios pueden actuar por cuenta propia y solo ejecutan órdenes de los titulares de las acciones. Desde la propia entidad que afirman que desconocen quienes son los verdaderos dueños de las acciones y que es imposible saberlo. En la Comisión Nacional del Mercado de Valores, no aparece ningún registro, y ni si quiera están obligados a comunicarlo. A partir de 2007, cualquier
accionista que superase el límite del 3% de una compañía cotizada está obligado a comunicarlo al supervisor y a la propia entidad, pero el real decreto que articuló esta medida para dar mayor transparencia al mercado estableció excepciones para los intermediarios financieros que presten servicio de administración y custodia.
A Santander no le consta que ninguno de los clientes que confían sus títulos a estas entidades posea más del 3% del capital y que pueda tener capacidad para influir en las decisiones del banco. Una de las ventajas de contar con el servicio de un banco custodio es que está garantizado el anonimato.
Desde hace años, Santander publica en sus memorias anuales los accionistas significativos y siempre aparecen las mismas firmas. State Street Bank, uno de los mayores bancos custodios del mundo, que gestiona más 1.240 billones de dólares procedentes de fondos de pensiones u otros vehículos de inversión, comenzó a operar en España a partir de 2005 comenzó a trabajar en la bolsa española. Es habitual, que en valores como Telefónica o BBVA también posea paquete de acciones significativas. Al igual que Chase Nominees, perteneciente al grupo JP Morgan.
Por su parte, EC Nominees es el banco custodio de Euroclear, el encargado de coordinar y gestionar las órdenes de compra y venta en las bolsas de Reino Unido, Holanda y Francia. Entró en el capital del banco en 2004 a raíz de la compra de Abbey. Clearstream Banking pertenece a la bolsa alemana y también actúa como banco custodio para el correcto funcionamiento del mercado. Guaranty Nominees pertenece a uno de los principales banco africanos con sede en Nigeria y con gran influencia en los mercados de capitales de la región. Al igual que BNY Mellon, Chase Nominees y State Street Bank tiene un perfil más destinado a inversores privado que ofrecer servicios a agentes bursátiles.
Banco custodios y evasión fiscal
Este tipo de entidades han estado en el blanco de la lucha contra el blanqueo de capitales y la evasión. A nadie se le escapa que la discreción que ofrecen a los inversores es aprovechada para el lavado de dividendo, que evita la retención fiscal. Al no estar domicializados en España no está sujetos a pagar impuesto en la retribución al accionista, lo hacen donde la entidad depositaria tenga su sede, por lo que si la presión fiscal se reduce la factura impositiva.
Aparte de la ingeniería financiera, Clearstream Banking, con sede en Luxemburgo, estuvo envuelto en grandes casos de corrupción y blanqueo de capitales, del siglo pasado, antes de ser adquirido por Deutsche Börse. Un antiguo empleado de la entidad denunció que la entidad jugó un papel fundamental en el escándalo del Banco Ambrosiano, que reveló las conexiones de la mafia italiana con la política y el Vaticano. Posteriormente, la entidad estuvo también implicada en los sobornos que cobraba distintos cargos del Gobierno de Sarkozy. Las acusaciones quedaron en aguas de borrajas, pero Clearstream Banking aparecía como la plataforma perfecta para que el dinero fluyera de un lado a otro a través de cuentas secretas. Lo que si fue confirmado por Estados Unidos es que la entidad ocultaba fondos provenientes de Irán en una cuenta de Citi para financiar acciones terroristas.