Arte y negocio: algo que funciona en Mallorca

El arte es mucho más que apreciar la pintura, la creatividad, el material aplicado o una escultura. El arte es una inversión, aunque complicada, y sin duda está cada vez más vinculada al mundo inmobiliario. “Quien compra una finca en Mallorca necesita cuadros para decorar las paredes”, cuenta el abogado Tim Wirth. Quien invierte en ladrillo, también tiene ganas de que los cuadros en las paredes o las esculturas en las esquinas cobren valor con los años igual que la casa. En el mundo de los cuadros la rentabilidad puede ser mucho más alta e inmediata que en el negocio inmobiliario. Por ello, el alemán tiene también en su despacho en El Born mucho arte expuesto que sus clientes saben apreciar y que, al mismo tiempo, le sirven como una inversión.

Para apostar por determinados artistas de forma inteligente hay que saber hacerlo. Para ello sirven en Mallorca ya las docenas de buenas galerías que hay en la isla y, también la propia intención, cree Wirth: “Un buen objeto de arte te tranquiliza y además es también una forma de marketing porque el arte con el que te rodeas dice algo sobre ti”, dice el alemán experto en derecho inmobiliario. Mercedes Korzeniowski que ha sido la directora de uno de los centros privados de Arte Contemporáneo más grandes de Europa, el “Centre of Contemporary Art en Andratx (CCA)”, es una amante del arte desde muy joven y una experta en desarrollo de negocios: “Es un mundo donde me siento cómoda y aquí en Mallorca he encontrado un lugar en el que puedo desarrollar proyectos que sirven de puente en el mundo del arte, entre la isla de Mallorca y otras ciudades y países”.

La primera feria de arte en Mallorca en 2020

Ella es suiza con raíces españolas, ha vivido muchos años en uno de los epicentros del mundo del arte, Basilea. Recientemente ha sido fichada por “Artfair Mallorca” para el desarrollo de la primera feria de arte en la isla. Es la responsable de Public Relations. La Feria de arte tendrá lugar el año que viene en el Palacio de Congresos de Palma: “La isla ya es un lugar de encuentro de coleccionistas, pintores y galerías muy importantes. Queremos llevar Mallorca a otro nivel en el mundo del arte internacional”, dice el galerista suizo Matthias Rüthmüller, el fundador y responsable del proyecto “Art Fair Mallorca” que ha despertado muchas expectativas en la isla. Debería haber tenido lugar ya este año, pero al final han decidido esperar un año más, “para tenerlo todo mejor preparado para nuestras galerías internacionales que quieren participar como expositores” y tener una proyección de años consecutivos, dice Korzeniowski.

El mundo turístico de alto nivel tiene un interés particular en promocionar la isla como un destino de arte para así conseguir más turistas de calidad, que inviertan en ella. “Por eso nos enfocamos, sobre todo, en la calidad más que en la cantidad”, dice Sixtine Crutchfield, responsable de “Artfair Mallorca”. Ya puede contar con la participación de algunas muy buenas galerías para el próximo año. Para los visitantes habrá un programa VIP de muy alto nivel que les hará conocer lugares y proyectos de la isla realmente únicos. También pueden disfrutar de los museos de los cuales algunos están ya entre los más reconocidos en Europa, aunque entre los viajeros típicos de Mallorca, que en su mayoría todavía pasan mucho tiempo en la playa, no se conocen tanto. Entre los museos más destacados figura el Museu Fundación Juan March, Palma, el Palau March Museu, Fundació Pilar i Joan Miró a Mallorca y Es Baluard Museu d’Art Modern i Contemporani de Palma.

El turismo barato de masas ya no gusta a los mallorquines

Sin embargo, el turismo de masas está en Mallorca cada vez peor visto, hasta provocó en 2018 por primera vez grandes protestas contra los cruceros y el aumento de los precios de los alquileres inmobiliarios en verano por la alta demanda. A este tipo de turistas/inversores también les quiere servir el CCA que han construido y ampliado una pareja danesa muy conocida en el mundo de arte contemporáneo, Jacob y Patricia Asbaek. Las salas de exposición situadas en los montes de Andratx ofrecen también la posibilidad para artistas internacionales de pasar una temporada en el centro. “En 2001 se ha abierto este espacio por esta razón: queríamos devolver algo a esta isla tan bonita y convertirlo en sitio de encuentro para amantes del arte contemporáneo en todo el mundo. También estamos abiertos a todos los que quieran tomar un primer contacto con este tipo de arte”, dice Jacob Asbaek. Así entran a veces también por ejemplo grupos de ciclistas, que pasan por coincidencia por el centro y entran por curiosidad.

“Si se quedan con solamente un recuerdo positivo en la cabeza, estamos contentos” dice Asbaek quien sabe que vender arte también es un arte. Nada es tan personal y subjetivo, el valor del arte contemporáneo nos es tan fácil de evaluar a la primera vista, hay que explicar y enseñar. “Esto es lo que hacemos aquí”; dice Asbaek. Otro punto de encuentro de arte importante en la isla es “La Nit de l’Art”, la “noche del arte” en Palma. Suele tener lugar el tercer fin de semana en septiembre, cuando el turismo de verano ya se ralentiza, reúne ya desde hace 23 años a artistas y coleccionistas de todo el mundo. Por la noche miles de personas pasean por las calles de la capital para visitar las galerías en las que antes quizás nunca hubieran entrado. Desde hace muy poco este evento se ha convertido también en una perfecta plataforma para vender arte al público y al atraer a coleccionistas y visitantes desde fuera el nombre de Mallorca se relaciona a nivel internacional con el arte. “Mucha gente solía venir por las tapas y bebidas gratuitas, pero entre ellos siempre hay alguno al que realmente le interesa el arte y quiere comprar”, cuenta el alemán Rudy Welches, cuya hija lleva la galería N12 en el centro de Palma.

Mallorca atrae cada vez más las grandes fortunas y así también galeristas

Para Frederic Pinya que lleva la reconocida galería Pelaires, la capital mallorquina provoca cada vez más interés internacional por conocer una oferta de arte diferente: “Es más auténtico quizás”. En este grupo de personas de todas las nacionalidades que uno encuentra en Palma está también el suizo Rüthmüller, quien dirige un espacio de encuentro de arte, “Basel Art Center”, y quiere conseguir ahora con “La Art Fai Mallorca” que se hable en todos los medios de comunicación internacionales de la isla y de su oferta artística. “Y claro que también queremos que las galerías que participan vendan”, dice Korzeniowski. El objetivo es seleccionar alrededor de 20 galerías reconocidas a nivel internacional que participen en el evento, entre ellas también algunas de la isla. 40 galerías internacionales han mostrado ya su interés.

No hay que ir muy lejos para encontrar a la crème de la crème del sector. Con el americano Drew Aaron y su “Red Gallery” se ha establecido uno de los coleccionistas más reconocidas en el mundo de arte moderno en Mallorca. El hecho que el padre de 42 años viva y trabaje en la isla, demuestra el atractivo que tienen las Baleares y su calidad de vida a nivel internacional para grandes fortunas. Aaron que reside en la pequeña ciudad de Alaró atrae con su galería cada vez más a americanos amantes del arte y de la buena vida de visitar la isla. Desde los 20 años Aaron vivía en Nueva York antes de establecerse con su mujer, la modelo Hana Soukupovà, en la isla. Su relación con el arte es pasional y tiene un buen instinto: “Cuando tenía 8 años vi un cuadro de Andy Warhol y me quedé intrigado. A otros chicos les da por los deportes y a mí me dio por el arte”. En Mallorca presenta en su galería en Palma entre otros un artista que él ha descubierto en Nueva York, Jean-Michel Basquiat, cuyos cuadros de grafiti ya valen millones. 

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