Normalmente, los libros de memorias de políticos se publican cuando el personaje pasa a una segunda fila y es libre para contar su visión de los hechos. Pero esta vez, el largo periodo de interinidad que se encuentra el actual Gobierno en funciones por el bloqueo político, ha provocado que coincida el estreno del libro de De Guindos mientras todavía se encuentra posesión de la cartera de Economía y en un momento delicada, con la polémica del nombramiento de su amigo José Manuel Soria como director ejecutivo del Banco Mundial.
El subtítulo de la publicación "De cómo evitamos el rescate y la economía recuperó el crecimiento" ya deja a las claras que sus páginas, serán una crónica de cuando España estuvo a punto de ser rescatada. Según informan las agencias, De Guindos cuenta como el FMI y la Comisión Europea estudiaron un rescate blando para la economía española con un Programa de Asistencia para el Acceso al Mercado (PAAM) para garantizar el acceso a los mercados de crédito.
La oposición del entonces presidente de la Comisión, Durao Barroso, y de Mariano Rajoy, evitó que impusieran un plan impulsado el ministro de finanzas alemán, Wolfgang Schäuble. "El acuerdo con el FMI se interpretaría quizá como un rescate light, aunque lo podíamos plantear como un apoyo o asistencia técnica que completaría la labor reformadora del Gobierno. No como una imposición", indica en el libro.
De Guindos cuenta que los momentos más críticos fueron 24 y 25 de julio de 2012, cuando tuvo que reconocerle a Schäuble que el país solo podía aguantar un mes antes de dejar de pagar las pensiones, las prestaciones por desempleo o los sueldos de los funcionarios, si Alemania no actuaba para reforzar el euro en la crisis griega.
Tensión con Rato
El ministro también el rescate de Bankia y como la entidad llevó a España al borde del abismo. De Guindos reconoce como se tensó durante semanas la relación con Rodrigo ato, presidente por entonces de la entidad y quien fuera su jefe en el Gobierno de Aznar. Desvela como se frustró intento de fusión del banco con
CaixaBank "por la falta de profesionalización". Además, indica que Rato intentó hasta el último momento aferrarse a su cargo, a pesar de anunciar su dimisión al propio Rajoy, con la propuesta de nombrar de inmediato a José Ignacio Goirigolzarri (actual presidente de Bankia) vicepresidente y consejero delegado para que después pasara a ser su sustituto.
De Guindos asume la responsabilidad de destapar el fraude de las tarjetas "black" de Caja Madrid y que no tuvo ningún en mandar el caso a la Fiscalía Anticorrupción, aunque estaban implicados miembros del PP. Dice que contaba con el respaldo de Rajoy, a pesar de la tensión que se produjo dentro del partido.