La entidad alemana vivió ayer un respiro en el mercado. Las acciones del banco subieron un 6% al calor de la información de AFP que apunta a que el banco podría recibir finalmente una multa de 5.400 millones de dólares por su operativa con valores respaldados por hipotecas antes del estallido de la crisis financiera. El gigante se enfrenta […]
Dirigentes Digital
| 01 oct 2016
La entidad alemana vivió ayer un respiro en el mercado. Las acciones del banco subieron un 6% al calor de la información de AFP que apunta a que el banco podría recibir finalmente una multa de 5.400 millones de dólares por su operativa con valores respaldados por hipotecas antes del estallido de la crisis financiera.
El gigante se enfrenta a una multa de más de 14.000 millones de dólares por la comercialización de las hipotecas subprime. Una sanción que hoy por hoy es impagable para el banco, sin afrontar una ampliación de capital o inyección de capital externa. El banco reconocía que solo tenía provisionado 5.500 millones.
En un comunicado a los empleados de Deutsche Bank, John Cryan ha insistido en que el banco tiene "bases sólidas" por lo que les ha asegurado que cualquier "percepción distorsionada desde fuera" no afectará al negocio diario de la entidad. "En la banca, la confianza es la base de todo. En este momento hay algunas fuerzas en juego en el mercado que quieren debilitar esta confianza en nosotros", ha apuntado.
El Departamento de Loretta Lynch ha sido muy dura con las entidades financieras por prácticas irregulares. Bank of America tuvo que pagar 16.650 millones hace dos años, JPMorgan Chase fue sancionado por su parte con 13.000 millones, Goldman Sachs pactó el pasado abril 5.100 millones y a BNP Paribas le cayó una multa de 8.900 millones. Todas relacionadas con las hipotecas subprime. Está por ver qué grado de ejemplaridad quiere impartir
Deutsche Bank tiene un largo historial en los tribunales. Recientemente fue sancionado con 1.900 millones, también por el Departamento de Justicia, por la venta de activos tóxicos entre inversores. La entidad se ha gastado en los últimos años 7.000 millones de euros en costas judiciales y se vio obligado a lanzar una macroampliación de capital de 8.500 millones para sanear sus cuentas y realizar provisiones ante la amenaza judicial.