Por Manuel Fuertes, CEO de Kiatt
Manuel Fuertes
| 30 oct 2024
Gestionar una single family office durante dos décadas nos ha brindado la oportunidad de participar en coinversiones junto a figuras destacadas del panorama inversor internacional. Más allá del beneficio financiero, la coinversión con actores clave de cada sector proporciona un aprendizaje continuo y muy valioso.
Un análisis exhaustivo de diversos sectores, una extensa red internacional y una gestión patrimonial estructurada y profesional son factores clave para acceder a oportunidades de inversión en etapas tempranas. Esta estrategia permite participar en proyectos que, generalmente, no son considerados por la mayoría de los inversores hasta fases de desarrollo más avanzadas. ¿Cuáles son los elementos que facilitan este acceso? A continuación, detallo algunos aspectos fundamentales:
1- Compromiso con el proyecto y financiación para todas las fases
Una de las grandes ventajas de coinvertir con los principales inversores mundiales es el acceso al capital y su compromiso con los proyectos. La falta de recursos nunca será un problema porque creen en las inversiones a largo plazo y de forma paciente. Además, garantizan la supervivencia de las nuevas compañías invirtiendo una y otra vez en las diferentes rondas cerradas que estas hacen.
2- Credibilidad
El prestigio y la reputación son sus poderosos activos intangibles y aportan credibilidad, lo que supone una puerta de acceso privilegiada a nuevas inversiones, nuevos inversores o incluso clientes. Al ser inversores y clientes de su propia empresa abren oportunidades tan dispares como hacer pruebas piloto de la tecnología en empresas de su cartera, ayudando así a mejorar la tecnología o abrir oportunidades claves para que ese desarrollo tecnológico llegue al mercado.
La reputación y la credibilidad influyen directamente en un aumento de la valoración de una empresa. Techstar realizó un estudio que demostraba que las empresas respaldadas por inversores de renombre tenían una valoración media de más del 85% en comparación con el resto de compañías.
3- La importancia de los contactos y redes
La experiencia como CEO de Kiatt me ha demostrado que sin una red internacional de partners y sin los contactos necesarios no se puede llegar a proyectos verdaderamente innovadores, a socios estratégicos y a coinversores de primer nivel. Como ejemplo del valor de las redes podemos mencionar nuestro capital relacional en Asia, que nos permite aumentar en más del triple la oportunidad de vender una compañía con éxito.
4- Oportunidades únicas
Solo invirtiendo con los mejores se tiene acceso a oportunidades de inversión exclusivas en el mercado que no están a la mano de cualquier inversor. Y cuanto más inviertes en estos grupos, y más valor añades a las inversiones, más te invitan a rondas cerradas, a proyectos exclusivos y a tecnologías que sus corporaciones apoyan como los nuevos estándares del mercado. A veces puedes tardar más de una década para establecer tu valor dentro de estos grupos de inversión, nuestro trabajo con la Universidad de Oxford durante años hizo que muchos de estos inversores nos acogieran y nos invitaran en sus rondas cerradas.
5- La formación como llave de acceso
Otra de sus enseñanzas que comparto plenamente es su amor por el conocimiento y la formación. Cuando invertimos, solo seremos capaces de obtener la mayor rentabilidad cuanto más sepamos de un mercado, un producto, un sector… Hay que ser hiperespecialista y más en sectores como el venture capital tecnológico y científico. Y esto solo se consigue con mucha formación constante y con los mejores. En una sociedad en la que los productos y servicios quedan obsoletos en cuestión de días, serán clave el conocimiento, la experiencia, la capacidad crítica y la deducción. De esta forma invertiremos en productos realmente importantes para la sociedad y nos podremos adelantar a cualquier tendencia.
6- Inversiones con valores
Y, por último, la inversión con valores nos permite retribuir a la sociedad y ser más justos. El capital privado tiene una gran fuerza transformadora y precisamente por eso debemos apostar por proyectos que pongan al hombre en el centro y le ayuden, verdaderamente, a desarrollarse, a crear un mundo mejor y más justo. Es nuestra responsabilidad dotar a las inversiones de valores, ética y sentido
En un entorno en el que, en muchas ocasiones, el acento se pone en la regulación, la seguridad del capital invertido o la cercanía a la hora de invertir, creemos que uno de los factores diferenciales a la hora de poner a trabajar el patrimonio familiar es buscar la compañía de aquellos socios que destaquen por su visión, por su claridad en la estrategia, por saber adelantarse a los usos de la tecnología, o incluso por saber crear estándares seguros que generen tendencia en la sociedad y por lo tanto nuevos mercados nunca antes existentes.