Los sindicatos de los trabajadores del banco fueron convocados ayer por la tarde para comunicarles el plan de reestructuración que llevará a cabo la entidad este año. Álvarez les informó que cerrará 450 oficinas y una reducción de los servicios centrales. El dirigente explicó el difícil escenario al que se enfrenta el banco con los tipos presionando los márgenes y el reto de la transformación digital.
Las sucursales afectadas suponen el 13% de la red de oficinas que tiene la entidad en España. Santander ha planteado potenciar oficinas más grandes, donde el excedente de personal reforzará este nuevo modelo de punto de venta. La entidad espera contar con 1.000 nuevas macrooficinas en tres años. En este año abrirá 350.
El banco cuenta actualmente con más de 24.000 trabajadores. La intención de la entidad es reducir la plantilla vía prejubilaciones y bajas incentivadas para evitar presentar un expediente de regulación (ERE).
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