Por Rodolfo Felipe, director de Control de Riesgos de Avalmadrid
Rodolfo Felipe
| 31 oct 2024
Hoy día 31 de octubre se celebra el Día mundial del Ahorro, una efeméride a la que Avalmadrid se suma para celebrarlo este año por partida doble, ya que se cumplen 100 años desde que instituciones financieras, gobiernos y organizaciones de todo el mundo decidieran unirse para promover activamente la importancia de ahorrar y gestionar de manera responsable las finanzas. Algo que afecta notablemente a las empresas –sobre todo, a pymes y autónomos–, ya que tener una adecuada financiación junto a los recursos propios necesarios -tanto los iniciales de partida, como los que se reinvertirán en el negocio procedentes de la obtención de resultados positivos- son cruciales en el momento de abrir, mantener y expandir un negocio.
Implementar estrategias efectivas de ahorro y gestión financiera permite a las pymes y a los autónomos mejorar sus negocios y lograr estabilidad económica a largo plazo. Además, tal y como señala el informe de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE, 2020), la implementación de una planificación financiera efectiva puede ayudarles a mejorar su capacidad para enfrentar los desafíos que surgirán en el desarrollo de la actividad.
Este proceso implica la definición de objetivos financieros, la identificación de estrategias que permitan alcanzarlos, y la puesta en marcha de acciones concretas para gestionar correctamente los recursos disponibles. Entre las estrategias de planificación financiera que toda pyme y autónomo deben definir al poner en marcha y desarrollar un negocio estarían entre otras las siguientes:
Desde Avalmadrid recomendamos a nuestros asociados que definan adecuadamente su planificación financiera para mejorar el rendimiento y la estabilidad de sus negocios, y les asesoramos en todo lo que sea necesario en el proceso de concesión de avales. Aspectos como la implementación de estrategias de ahorro y de gestión financiera, la elaboración de un presupuesto, el control y gestión de ingresos y gastos, la optimización de flujos de efectivo y la suficiencia patrimonial requieren de un enfoque disciplinado y una mentalidad pragmática orientada hacia el crecimiento y la mejora de la eficiencia. En este sentido, la adopción de tecnologías y sistemas que permitan la automatización de los procesos -agilizándolos en todo lo posible- ayudarán a su vez a reducir los costes asociados a tareas manuales y repetitivas.
Las estrategias financieras pueden variar dependiendo del sector, el tamaño y las metas específicas de cada negocio, pues cada pyme es única y requiere de un enfoque que, sobre la base referida anteriormente, se adapte a sus circunstancias específicas. Por lo tanto, es recomendable buscar asesoramiento financiero profesional para adaptar las estrategias a las necesidades individuales, y garantizar así una implementación adecuada que permita una evolución sostenible y próspera.
Además, se deben considerar factores externos como la competencia, el entorno económico y las normativas y regulaciones que afectan a cada sector. Tener una buena salud financiera es imprescindible para mantener un negocio a flote y expandirlo, así como para optimizar la toma de decisiones, especialmente en tiempos de incertidumbre o crisis económica. Es fundamental realizar periódicamente una valoración de todas las variables que intervienen en el desarrollo del negocio para evitar cometer errores que afecten negativamente al asentamiento y al adecuado desarrollo de la empresa.