Mientras en la crisis los sueldos bajos han caído un 28%, los más altos se han mantenido o han aumentado, según denuncia Oxfam Intermón en un informe con datos sacados de la Muestra Continua de Vidas Labores de la Seguridad Social. La crisis económica ha provocado una devaluación generalizada de los sueldos, que han disminuido […]
Dirigentes Digital
| 03 nov 2016
Mientras en la crisis los sueldos bajos han caído un 28%, los más altos se han mantenido o han aumentado, según denuncia Oxfam Intermón en un informe con datos sacados de la Muestra Continua de Vidas Labores de la Seguridad Social. La crisis económica ha provocado una devaluación generalizada de los sueldos, que han disminuido una media de 6,1% entre 2008 y 2014, pero no se han distribuido por igual. Según el índice Gini, nuestro país muestra una de las distribuciones salariales más desiguales del mundo que se debe a un desplome del 10% en la franja de población que cobra menos, cerca del 28%, y cierto descenso de los salarios medios, en torno a un 8%. Esta diferencia salarial afecta especialmente a las mujeres trabajadoras que ganan un 18,8% menos que los hombres. Esto significa que las mujeres trabajan 50 días más que los hombres para conseguir el mismo salario. Otro colectivo muy perjudicado es el de los más jóvenes, con un 21% de trabajadores menores de 24 años en riesgo de pobreza y exclusión social. Esto agudiza el fenómeno de los trabajadores y trabajadoras pobres: personas que pese a tener un trabajo no llegan a fin de mes. España es el cuarto país de la Unión Europea con mayor población trabajadora en esta situación, un 13,2%. Oxfam Intermón propone varias medidas para reducir la brecha salarial como aumentar el salario mínimo interprofesional hasta alcanzar los 1.000 euros mensuales netos en 2020, “aumentando los salarios de los tramos que están por debajo de la línea de pobreza laboral, para que las personas trabajadoras con salarios más bajos puedan vivir dignamente”. También apunta a la penalización de empresas que incumplan el derecho a la igualdad entre hombres y mujeres. Así como el establecimiento de escalas salariales más justas por normativa estatal que regulen las diferencias salariales dentro de los centros de trabajo.