El alto nivel de endeudamiento en las administraciones públicas es uno de los principales problemas que lastra el crecimiento en la Unión Europea. De hecho, la crisis económica mundial de 2008 tuvo orígenes distintos en Estados Unidos y en Europa, ya que en el continente americano se produjo el colapso de la burbuja financiera de […]
Dirigentes Digital
| 27 feb 2017
El alto nivel de endeudamiento en las administraciones públicas es uno de los principales problemas que lastra el crecimiento en la Unión Europea. De hecho, la crisis económica mundial de 2008 tuvo orígenes distintos en Estados Unidos y en Europa, ya que en el continente americano se produjo el colapso de la burbuja financiera de las hipotecas subprime, mientras que al otro lado del Atlántico estalló la burbuja de la deuda soberana con la quiebra técnica de Grecia en mayo de 2010. El pasivo conjunto de los gobiernos comunitarios supone aproximadamente unos 12,7 billones de euros. El grado de endeudamiento se mide en función del volumen de las obligaciones contraídas, pero sobre todo en relación a este con el PIB de cada estado. España es el segundo país más endeudado de la UE sobre el tamaño de su actividad productiva, con un 99,7% de obligaciones sobre el PIB al cierre de 2016. A la cabeza se sitúa Italia, cuyo ratio de deuda alcanzó el 132,8%. El resto de las grandes locomotoras europeas registraron tasas cercanas, Francia un 96,4% y Reino Unido un 88,6%, aunque Alemania marcó la diferencia al situarse en el 68,2%. La tendencia individual se puede extrapolar al mercado comunitario; el promedio de deuda en la Unión sobre su producto interior fue del 85,1%, mientras que el de la zona euro llegó hasta el 91,5%. Si tomamos como parámetro el volumen de las obligaciones, Italia volvió a ser el país más endeudado, con hasta 2,2 billones al cierre del tercer trimestre. Alemania y Francia le siguieron de cerca, con un pasivo de 2,16 billones en ambos casos. Reino Unido alcanzó los 1,96 billones y España, está vez a la cola, cerró el cuarto trimestre en los 1,105 billones. La Comisión Europea espera que la deuda pública de las principales economías crezca en 2017, a excepción de los casos de Alemania y Reino Unido. En relación a España, las obligaciones alcanzarán el 100% del PIB durante este año y volverán al 99,7% en 2018, según el informe de “Perspectivas de Invierno”. Francia pasará también del 96,4% al 96,7% en 2017 y al 97% en 2018. El caso más extremo es el de Italia, que no sólo mantendrá los mayores ratios de endeudamiento, sino que los incrementará hasta el 133,3% y el 133,2% durante los próximos dos años. La agencia de calificación Fitch advirtió en un informe recientemente sobre la baja calidad de la deuda soberana mundial. Según sus ratings, tan sólo once países cumplen con los requisitos de máxima calidad ‘AAA’, y no hay perspectivas de que la valoración cambie. Australia, Canadá, Dinamarca, Alemania, Luxemburgo, Holanda, Noruega, Singapur, Suecia, Suiza y Estados Unidos son los únicos que alcanzan esta ratio, un 10% del total de países incluidos en las calificaciones. Este es el menor porcentaje histórico de deuda soberana incluido en el grupo.