La economía española registró una capacidad de financiación de 8.943 millones de euros (3,1% PIB) durante el cuarto trimestre de 2016, frente a los 10.191 millones alcanzados en el mismo periodo de 2015 (3,6% PIB), según los últimos datos publicados por el INE. La caída de 1.248 millones vino motivada por una salida de capitales […]
Dirigentes Digital
| 03 abr 2017
La economía española registró una capacidad de financiación de 8.943 millones de euros (3,1% PIB) durante el cuarto trimestre de 2016, frente a los 10.191 millones alcanzados en el mismo periodo de 2015 (3,6% PIB), según los últimos datos publicados por el INE. La caída de 1.248 millones vino motivada por una salida de capitales equivalente a los 2.552 millones (-73,3%), hasta alcanzar un saldo de 894 millones. Esta ‘fuga’ tiene su origen en el descenso del volumen de ingresos por transferencias de capital y de la adquisición y disposición de activos no financieros. En contrapeso, el saldo de intercambios exteriores de bienes y servicios se incrementó en 1.031 millones, hasta alcanzar los 5.775 millones. Esta variación estuvo causada por un incremento de las exportaciones en un 4,7%, frente a un incremento de las importaciones del 3,7%. Por otro lado, el saldo de rentas corrientes y transferencias con el resto del mundo subió en 173 millones, lo que equivale a 2.274 millones en total. En el conjunto de 2016, la economía española generó un superávit de 22.752 millones (2% del PIB), lo que supone hasta 1.465 millones extra respecto a 2015. La mayor capacidad de financiación vino motivada por un avance en la cuenta de intercambios con el exterior del 23%. En relación al sector privado, la renta de los hogares e instituciones sin ánimo de lucro creció un 2,3% respecto al cuarto trimestre de 2015, hasta alcanzar los 186.529 millones. Como consecuencia, el gasto en consumo final avanzó un 3,7%, hasta los 164.155 millones, mientras que el ahorro se redujo un 7,8%, hasta los 21.911 millones, por lo que la tasa de ahorro se situó en el 11,8% de la renta disponible (1,5 puntos inferior a la de 2015). Por otro lado, la inversión de las familias se incrementó en 1.139 millones, hasta alcanzar los 9.280 millones. Para el conjunto de 2016, la tasa de ahorro de los hogares se situó en el 7,7% de la renta disponible, 0,5 puntos por debajo de la de 2015, motivada por un avance del 3% en el consumo final. Esta cifra alcanzó los 54.072 millones, lo que permitió financiar una inversión de 32.443 millones, a pesar de un saldo negativo de transferencias de capital equivalente a 605 millones. Las sociedades no financieras incrementaron su renta disponible hasta un 7,8% en 2016, impulsadas por una subida del 6,5% en el saldo de rentas primarias del sector. Por su parte, este aumento se apoyó un incremento del 5,2% en el excedente bruto de explotación, lo que compensó con creces la caída del 0,9% en las rentas de la propiedad. Este resultado, junto al saldo neto de transferencias de capital de las empresas (6.176 millones) fue suficiente para financiar la inversión del sector, que alcanzó los 167.086 millones (+9%), y se tradujo en un superávit de 30.924 millones.