La información sobre las actividades de Responsabilidad Corporativa se ha convertido en una práctica asumida por cada vez más empresas y, al mismo tiempo, abarca un número creciente de temáticas. Así lo muestra la décima edición del informe global de KPMG sobre reporte de las políticas de Responsabilidad Corporativa de 2017, en el que participan las […]
Dirigentes Digital
| 24 oct 2017
La información sobre las actividades de Responsabilidad Corporativa se ha convertido en una práctica asumida por cada vez más empresas y, al mismo tiempo, abarca un número creciente de temáticas. Así lo muestra la décima edición del informe global de KPMG sobre reporte de las políticas de Responsabilidad Corporativa de 2017, en el que participan las 100 mayores empresas de 49 países. Este estudio desvela cuatro nuevas tendencias en los informes empresariales anuales. Se trata del reconocimiento de los riesgos financieros vinculados al cambio climático, la mención a los Objetivos de Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas, el reconocimiento de los Derechos Humanos como cuestión de negocio y las medidas y objetivos de cada empresa para la reducción de sus emisiones contaminantes. El cambio climático como factor de riesgo A pesar de que el cambio climático y su posible impacto financiero destaca en el informe, un 72% de las compañías consultadas todavía no lo menciona en sus reportes anuales. Dentro de las que sí lo tienen en cuenta, solo un 4% facilita a los inversores análisis sobre el posible valor en riesgo del negocio. Por sectores, las compañías forestales y papeleras (44%), químicas (43%), mineras (40%) y de combustibles fósiles (39%) son las que más reconocen el riesgo vinculado al clima en sus informes. En el otro extremo, figuran empresas dedicadas a atención sanitaria (14%), transporte y ocio (20%) y distribución minorista (23%) como los que menos reconocen el riesgo climático. Por distribución geográfica, solo en cinco países la mayoría de sus grandes empresas aluden a los riesgos financieros relativos al clima en sus informes financieros: Taiwán (88%), Francia (76%), Sudáfrica (61%), Estados Unidos (53%) y Canadá (52%). En el caso de España, el porcentaje cae hasta el 29%, aunque el estudio de KPMG señala que ese riesgo no se cuantifica. Sostenibilidad, Derechos Humanos y Emisiones En cambio, España figura en cabeza dentro de los países en los que sus cien principales empresas vinculan su estrategia de Responsabilidad Corporativa con los 17 objetivos globales de la ONU para erradicar la pobreza, proteger el medio ambiente y garantizar la prosperidad mundial. De hecho, un 53% de las empresas españolas consultadas hacen referencia a ello, frente al 39% de las 4.900 compañías analizadas en el informe y al 43% en el caso de las 250 mayores empresas del mundo. De la misma manera, un 82% de compañías españolas reconoce los derechos humanos como una cuestión de responsabilidad corporativa que la empresa precisa abordar, frente al 73% a nivel global. Además, el 67% de las 250 empresas más importantes del mundo revelan sus propios objetivos para reducir las emisiones de CO2, aunque un 69% no los alinea con los objetivos climáticos establecidos por los Gobiernos, las autoridades regionales (como la UE) o la ONU. En España, en cambio, es el 60% de las grandes empresas recoge esos objetivos.