El gigante automovilístico alemán Volkswagen tuvo en 2015 una pérdida neta de 1.582 millones de euros, frente a las ganancias de 10.847 millones de euros que obtuvo en 2014.
La pérdida operativa de Volkswagen fue el año pasado de 4.069 millones de euros, frente al beneficio operativo de 12.697 millones de euros en 2014, y la facturación mejoró en 2015 un 5,4 %, hasta el récord de 213.292 millones de euros.
El presidente de Volkswagen, Matthias Müller, ha explicao en rueda de prensa que esas provisiones sirven para cubrir las modificaciones técnicas necesarias en las llamadas a revisión de vehículos, para el pago de indemnizaciones a clientes y para sufragar los costes de los litigios judiciales.
Ante esta situación, Volkswagen va a rebajar drásticamente la remuneración de sus accionistas con cargo a los resultados del pasado año y va a repartir un dividendo por acción ordinaria de 0,17 euros y por acción preferente de 0,17 euros.
"El sólido resultado de los ingresos por ventas no se refleja en las cifras de beneficio", según ha informado Volkswagen. "Las operaciones del grupo Volkswagen están en plena forma, como muestran las cifras antes de extraordinarios del pasado año fiscal", explicó Müller que añadió que, "la actual crisis -como revelan las cifras presentadas hoy- va a tener un impacto en la posición financiera de Volkswagen". "Tenemos la firme intención de tratar la difícil situación con todos nuestros medios", según Müller.
La venta de las acciones de Suzuki proporcionó 2.800 millones de euros. Volkswagen tiene una liquidez neta de en la división automovilística de 24.500 millones de euros (17.600 millones de euros). El grupo Volkswagen, que agrupa entre otras las marcas VW, Audi, Skoda, Seat, Bentley y Lamborghini, prevé mantener la disciplina de costes en 2016.
hemeroteca
