La cruzada de la CNMC contra los cárteles

La lucha de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) contra los cárteles de empresas no da descanso. El último capítulo de la CNMC en materia de sanciones tiene que ver con la imposición de multas por valor de 68 millones de euros a empresas del sector de la mensajería y la paquetería por repartirse clientes y, en algunos casos, por pactos de “no agresión”. Durante los últimos tres años, la CNMC ha impuesto multas por valor de 785 millones, con el año 2015 como momento cumbre, cuando 250 empresas tuvieron que hacer frente a sanciones de 506 millones de euros. Esta cifra supone el 90% del total de multas que impuso la CNMC ese año. Con respecto a 2016, la suma total de sanciones se redujo a 218 millones, que en ese año representaron el 96% de todas las multas de competencia. En el caso de 2017, 65 empresas recibieron sanciones de la CNMC, por un importe total de 60 millones de euros, según las publicaciones del organismo. Si bien la cuantía final pudo reducirse en cada caso, las sanciones penalizan con dureza estas prácticas. El reciente castigo a Correos Express es de 19,6 millones de euros, la cifra más alta en las últimas sanciones a las empresas de paquetería y mensajería que alcanzan un total de 68 millones de euros. De esta forma, el regulador impone la primera sanción por cártel en 2018, aunque las primeras investigaciones datan de noviembre de 2015. En ese momento, la sospecha de prácticas anticompetitivas llevó a la CNMC a realizar inspecciones en el sector de la mensajería y paquetería comercial. El resultado del expediente sancionador que se registró en julio de 2016 es sancionar los compromisos de “no realizar ofertas comerciales a ninguno de los clientes de su competidora” por parte de las empresas. El expediente descubre la existencia de nueve cárteles, en los que participan empresas como Correos Express o MBE, con cuatro cárteles cada una, o ICS, con tres. Los efectos de estos cárteles son la privación “a todos sus clientes de recibir ofertas de varios operadores de mensajería y paquetería en España”. Estas conductas significan infracciones “muy graves” que han involucrado a empresas como UPS (19,2 millones), TNT (16,2 millones), DHL (5 millones), Redyser (2,1 millones) o Tourline (3,1 millones).