Con pronósticos favorables de buena parte de analistas y consultoras, la economía latinoamericana comienza a retomar el crecimiento que perdió durante la recesión en que estuvo inmersa en los últimos tres años. No obstante, para prevenir nuevas caídas y obtener un crecimiento sostenible, los países de la región deben aumentar su eficiencia en la inversión, […]
Dirigentes Digital
| 05 abr 2018
Con pronósticos favorables de buena parte de analistas y consultoras, la economía latinoamericana comienza a retomar el crecimiento que perdió durante la recesión en que estuvo inmersa en los últimos tres años. No obstante, para prevenir nuevas caídas y obtener un crecimiento sostenible, los países de la región deben aumentar su eficiencia en la inversión, apuntando a promover la acción pública en infraestructura y la iniciativa privada con alto valor privado y social. Todo ello en un contexto en que el crecimiento “será insuficiente para mantener el porcentaje de la región en el PIB global”. Así lo sostiene ‘La hora del crecimiento’, documento de la 59ª Asamblea del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), realizada en Argentina la semana pasada. TRABAJO E INVERSIÓN “Es probable que el crecimiento proyectado sea insuficiente para satisfacer las aspiraciones de la población”, señalan Eduardo Cavallo y Andrew Powell, autores del trabajo, quienes observan, además, que la participación laboral de las mujeres se desacelerará. En esa línea, la inversión que recomiendan los técnicos apunta a que los países utilicen recursos propios y de manera “más eficiente” para incrementar su PIB sin aumentar su deuda. “Las inversiones con recursos públicos deberían escogerse cuidadosamente y el marco general debería favorecer el aumento de inversiones privadas con alto valor privado y social”, puntualiza el estudio. FRENAR LA DEUDA “Chile cerró 2017 con su deuda pública más alta en 24 años”, publicaba un diario local a inicios de este año. A pesar del tono grave del título, los datos de ese país –cuya deuda bruta pública es el 24,6% del PIB– no son los más altos. Brasil, por ejemplo, tuvo una deuda pública bruta del 76% de su PIB en 2017 y puede llegar al 80% este año, según proyecciones de su Banco Central. Este país, la economía más grande de Sudamérica, crecerá un 1,9% este año, según la proyección. GIGANTE ENTRE NUBES Economistas y analistas consultados por DIRIGENTES, en tanto, condicionan esa cifra al resultado de las elecciones presidenciales que se realizarán en octubre allí. “Por ahora está todo en una nebulosa. Tendremos un panorama más claro entre junio y julio, pero creemos que el presidente que podrá recuperar el crecimiento será un candidato reformista”, dijo la consultora de inversiones de un importante banco local. Su evaluación fue formulada en vísperas de que la Justicia se expidiera sobre la prisión del expresidente Lula da Silva, el principal nombre en los sondeos de intención de voto a pesar de haber sido condenado en segunda instancia a 12 años de prisión por cargos de corrupción. El BID se reúne anualmente para evaluar las cuentas de 48 países de la región, tomar decisiones y emitir orientaciones. Al cerrar su 59a Asamblea en Mendoza (Argentina), el organismo estima que la región crecerá 1,9%, resultado que -concluye- podría llegar al 2,5% si no fuera por Venezuela, que caerá 15%, afectando con ello los números regionales.