Julius Baer acaba de presentar su primer informe sobre la riqueza en Europa, que deja claro la diferencia entre países y los retos a los que se enfrentan los grandes patrimonios europeos. En 2013, la riqueza europea superó los niveles anteriores a la crisis y marcó un nuevo máximo histórico en 56 billones de euros, […]
Dirigentes Digital
| 02 oct 2014
Julius Baer acaba de presentar su primer informe sobre la riqueza en Europa, que deja claro la diferencia entre países y los retos a los que se enfrentan los grandes patrimonios europeos.
En 2013, la riqueza europea superó los niveles anteriores a la crisis y marcó un nuevo máximo histórico en 56 billones de euros, un 1,7% más que el año anterior. Sin embargo, la evolución de la riqueza desde el estallido de la crisis financiera en 2007 en los diferentes países ha variado sustancialmente: Suiza y Alemania han incrementado su riqueza neta frente a los máximos anteriores a la crisis en 1 billón y 2 billones de euros, respectivamente, mientras que en España ha descendido un 28% y en Grecia ha caído un 23%, lo que equivale a una reducción de la riqueza en manos privadas de 1,4 billones y 169.000 millones de euros, respectivamente, en términos absolutos.
Amancio Ortega aparece en el primer puesto del ranking europeo, con una fortuna estimada por Julius Baer en 48.000 millones de euros. Su hija Sandra Ortega cuenta con un patrimonio de 5.200 millones de euros, el séptimo más elevado del ranking de mujeres.
Frente a estas cifras, destacan las de patrimonio medio por países. En el caso español, apenas suma 92.300 euros, una cifra muy inferior a los 432.200 euros de un luxemburgués o de los 394.600 euros de un suizo, los más ricos del continente. Y muy por encima de la media de 167.100 euros.
Más de dos tercios de la riqueza europea se encuentran en los grandes países del núcleo europeo, como Alemania, el Reino Unido, Francia e Italia. El núcleo europeo también posee el mayor número de hogares con rentas altas; así, Alemania puede presumir de tener 1,4 millones de hogares millonarios, Francia 1,3 millones, Italia 818.000 y el Reino Unido 796.000.
La distribución de la riqueza en Europa sigue siendo diversa, pero el informe calcula que, de media, el 10% más rico de los hogares europeos posee más de la mitad de la riqueza del continente, mientras que la mitad con menos riqueza posee menos del 10% de la riqueza total europea.
La concentración de la riqueza es más acusada en Austria y Alemania (el 40% y el 35% de la riqueza total en manos privadas es propiedad del 1% más rico), mientras que en el Reino Unido, Grecia y los Países Bajos la concentración alcanza su nivel más bajo (el 15% o menos de la riqueza total en manos privadas es propiedad del 1% más rico). En el informe, se hace referencia a nuevos conjuntos de datos a largo plazo que sugieren que la concentración de la riqueza vuelve a aumentar en Europa, después de que buena parte de la riqueza europea quedara destruida en el s. XX por las dos Guerras Mundiales y la Gran Depresión de 1929.