En esta "guerra energética" en la que nos encontramos inmersos, la "batalla" por la cuota de mercado aún no ha terminado. La producción de la OPEP sigue subiendo y también en otros lugares del mundo, es más, según repunta la valoración del "oro negro" los incentivos para reducir la producción, especialmente en el shale oil […]
Dirigentes Digital
| 26 jun 2015
En esta "guerra energética" en la que nos encontramos inmersos, la "batalla" por la cuota de mercado aún no ha terminado. La producción de la OPEP sigue subiendo y también en otros lugares del mundo, es más, según repunta la valoración del "oro negro" los incentivos para reducir la producción, especialmente en el shale oil (petróleo de esquisto) se reduce…
Mientras tanto China continúa incrementando sus reservas estratégicas y, aunque este factor es un importante "viento a favor", no sostendrá indefinidamente a la demanda. Al mismo tiempo, debemos tener en cuenta la "prima política" con el desarrollo de los acontecimientos en Yemen, Irak e Irán, que traerán volatilidad al mercado.
En este contexto, ETF Securities lo tiene claro: "Creemos que hay potencial para una corrección en los precios a corto plazo, que dará a los inversores un punto de entrada más atractivo en el futuro cercano".
Opinan estos expertos que el optimismo sobre el repunte de la demanda se verá oscurecido hasta que realmente asistamos a un recorte material de la oferta. Este "choque" lastrará al petróleo a la baja, en un movimiento que será fundamental para mantener el actual ritmo de recuperación de la demanda. Así, una vez que los recortes en el capex comiencen a hacer efecto sobre la producción, los precios iniciarán una nueva recuperación.
Sus previsiones pasan por una caída del Brent hasta los 60 dólares por barril, y del West Texas hasta los 55 dólares, para después retomar las alzas en el cuarto trimestre hasta alcanzar los 75/70 dólares, respectivamente, ya en 2016.
Ahora bien, la firma quiere dejar claro que, en su opinión, el fracking estadounidense no será la víctima principal en esta "pelea" por la cuota de mercado. "A pesar del descenso en el número de plataformas norteamericanas no esperamos que la producción de shale oil disminuya sustancialmente durante un periodo sostenido", afirman.
Y es que, las infraestructuras asociadas al petróleo de esquisto se ponen en marcha de nuevo fácilmente y al ser una industria muy ágil "será capaz de sacar partido de unos mejores precios". Según IHS hay aproximadamente 1.400 pozos perforados sin terminar en el sur de Texas, aproximadamente un 40% podrían ser económicos a precios por debajo de los 30 dólares. Suponiendo que por mes se pueden "completar" unos 50, la firma calcula que podríamos ver 123.000 barriles diarios adicionales a finales de año.
En resumen, "el potencial de producción de Estados Unidos es tremendo. No creemos, por tanto, que vaya a ser una ‘baja’ en esta batalla por la cuota de mercado, sino que más bien lo serán los productores convencionales de alto coste", como las operaciones en aguas profundas u otros proyectos intensivos en capital.