Janet Yellen, actual ‘líder’ del banco central norteamericano, fue la principal protagonista, por las pistas que pudiera dar en torno al ciclo de subidas de tipos. Sin embargo, su predecesor más inmediato, Ben Bernanke (2006-2014), así como los dos anteriores ‘jefes’ de la Fed, Alan Greenspan (1987-2006) y Paul Volcker (1979-1987) también contaron sus ‘batallas’ […]
Dirigentes Digital
| 08 abr 2016
Janet Yellen, actual ‘líder’ del banco central norteamericano, fue la principal protagonista, por las pistas que pudiera dar en torno al ciclo de subidas de tipos. Sin embargo, su predecesor más inmediato, Ben Bernanke (2006-2014), así como los dos anteriores ‘jefes’ de la Fed, Alan Greenspan (1987-2006) y Paul Volcker (1979-1987) también contaron sus ‘batallas’ particulares contra una inflación disparada este último o la crisis de los 80-90 el penúltimo.
"Hemos tenido enormes responsabilidades para hacer frente a riesgos terribles", resumió Bernanke. Mientras Greenspan apuntaba que "el verdadero problema de la política monetaria es que se basa principalmente en previsiones y nuestra capacidad de predecir es limitada. ¿Cómo podemos transmitir lo que sabemos sin entrar en el área de previsión más allá de nuestro conocimiento?". Y Volcker recordaba: "Estaba preocupado todo el tiempo. A veces paseaba tanto en la oficina que temía hacer un agujero en la alfombra".
Por su parte, Yellen afirmaba tajante que no fue un error subir los tipos en diciembre. "La economía norteamericana sigue un rumbo sólido y la Fed aún mantiene la estrategia de subir tipos (…) el mercado laboral está cerca de pleno empleo y la inflación no puede ser mantenida de forma indefinida por el dólar y los precios del crudo", detallaba.
Si bien, matizaba sus palabras apuntando que lo apropiado es un ritmo de incrementos "gradual". Asimismo, respondía a las recientes acusaciones del candidato republicano a la presidencia, Donald Trump, negando que haya una ‘burbuja’ en Estados Unidos. El controvertido político ha señalado recientemente que la Fed está generando burbujas financieras pero sin impacto positivo en la economía real.
En este sentido, Volcker advirtió de que hay ciertas "piezas del sistema que están sobredimensionadas", aunque descartando burbujas. Y Greenspan añadió que la política monetaria "no debe soportar toda la carga de combatir la desaceleración económica", aunque se mostró en contra de aumentar el gasto público.
"El eterno debate entre la economía real y la financiera; entre la financiera y la economía real (…) Al final, todos somos conscientes de que la liquidez no da la felicidad; pero te permite el tiempo necesario para tomar medidas que te permitan alcanzarla. Lamentablemente, los que tienen que tomar estas medidas (políticos) no las reconocen. O no lo hacen de forma adecuada", explica Citi.