Aunque los expertos capitaneados por Ramón Forcada descartan que este evento "mute en una nueva recesión", pues, según sus primeros cálculos, "los daños serán limitados", si se lamentan del impacto que tendrá en la renta variable, pues esperaban que ésta recuperará durante el verano una parte importante de las pérdidas con las que inaugurábamos 2016, […]
Dirigentes Digital
| 29 jun 2016
Aunque los expertos capitaneados por Ramón Forcada descartan que este evento "mute en una nueva recesión", pues, según sus primeros cálculos, "los daños serán limitados", si se lamentan del impacto que tendrá en la renta variable, pues esperaban que ésta recuperará durante el verano una parte importante de las pérdidas con las que inaugurábamos 2016, en el caso de una victoria del Bremain.
Con todo, ven el ‘vaso medio lleno’ y destacan que no todos los últimos acontecimientos son malos, pues "el riesgo de que surjan gobiernos que apliquen una gestión económica de ‘resultados cuestionables’ se ha reducido tras el desenlace electoral en España. Esto no alcanzará a contrarrestar el Brexit, pero sí ayudará a reducir tensiones".
Tampoco los bancos centrales lograrán neutralizar el impacto de este ‘cisne negro’, pero sí los "suavizarán". Esperan estos analistas que intervengan y consigan estabilizar la situación: "Las compras de bonos (QE), que desde ahora ganarán dimensión y determinación, forzarán que el flujo de fondos termine desplazándose hacia Bolsas. Sin embargo, parece improbable que éstas avancen como lo habrían hecho si no hubiera ganado la salida de la Unión".
Así, ante la elevada incertidumbre, que implica aplicar primas de riesgo más altas al tiempo que revisar a la baja los beneficios empresariales esperados, sobre todo en Europa, pero no exclusivamente, se reducen también las valoraciones y, por tanto, el atractivo del equity. En este contexto, reducen su exposición recomendada a riesgo un 5% en sus carteras modelo (acciones y fondos).
Pero, lo hacen, adoptando lo que denominan "proactividad prudente", esto es, "acompañando la evolución del mercado en lugar de intentar anticiparlo con movimientos bruscos que podrían llevarnos a cometer errores. Esta nueva situación también puede generar oportunidades de medio plazo y conviene tener presente que, para poder beneficiarse de las oportunidades que ofrece un mercado es necesario mantener cierta exposición al mismo". Un posicionamiento, reconocen, "tan obvio como difícil de aplicar en la práctica, a menos que se tenga la suficiente sangre fría… y conocimiento adecuado de las compañías".
En concreto, se trata de elegir "calidad antes que crecimiento, nombres antes que sectores". Explican estos analistas que no se sienten "forzados a introducir cambios de calado, sino
más bien ajustes: nos movemos moderadamente hacia compañías más aburridas, predecibles y con poca deuda (Inditex, REE, Enagás, Adidas, Nestlé o Carrefour) y reducimos o salimos de otras de perfil de riesgo superior y/o expuestas a Reino Unido (bancos, seguros, Telefónica, Iberdrola, etc.)".
Todo ello, eso sí, sin "sin abandonar totalmente aquellas que por su perfil de riesgo están siendo especialmente castigadas, pero cuyos fundamentales sean buenos y no permitan esperar una recuperación una vez que el mercado se normalice. Ejemplos de esto último son Mediaset, Cie Automotive, Siemens o Philips, que permanecen en nuestras carteras modelo de acciones, a pesar de que reduzcamos algo sus pesos".
Potencial de Ibex, Euro Stoxx 50, Nikkei y S&P 500
Bajo unas hipótesis de trabajo más conservadoras y unas primas de riesgo algo superiores debido al aumento de la incertidumbre, ninguna de las cuatro Bolsas que valora la firma ofrece un potencial de revalorización superior al 15%: se reduce al 5% para el Ibex (8.262 puntos) y al 1% para el NIkkei (15.537 puntos); mientras que alcanza el 13% para el Euro Stoxx 50 (3.120 puntos) y asciende al 14% para el S&P 500 (2.314 puntos).
Otras recomendaciones
En consecuencia, geográficamente prefieren Estados Unidos, "seguido de India, pero en ésta sólo para perfiles de riesgo agresivos y considerándola como una excepción positiva entre los emergentes".
Mientras, "los bonos americanos, incluido el high yield, ganan atractivo y visibilidad. Y el inmobiliario español (socimis) mantiene el suyo tras el resultado electoral. Por sectores preferimos utilities, concesiones, consumo y distribución".