"Si realmente creemos en la Europa integrada y en el pasaporte europeo, hay que tirar hacia adelante, los políticos deben ponerse las pilas". Esta es la sensación que domina a las pequeñas gestoras de fondos europeos que, pese a los avances por la integración financiera en la región, siguen encontrando numerosas trabas para comercializar sus […]
Dirigentes Digital
| 25 abr 2016
"Si realmente creemos en la Europa integrada y en el pasaporte europeo, hay que tirar hacia adelante, los políticos deben ponerse las pilas". Esta es la sensación que domina a las pequeñas gestoras de fondos europeos que, pese a los avances por la integración financiera en la región, siguen encontrando numerosas trabas para comercializar sus productos en distintos países.
Ante este escenario, la Comisión Europea lanzará durante el mes de mayo una consulta para tratar de eliminar estas barreras aún existentes en la industria. El pasado 22 de abril, durante una conferencia en Ámsterdam, el comisario Jonathan Hill advertía de la preocupación de las gestoras por el vigente ‘pasaporte europeo‘, que, a juicio del sector, "no está funcionando correctamente".
En principio, el pasaporte europeo para los fondos de inversión se creó para permitir a las gestoras domiciliadas en cualquiera de los países miembros vender sus fondos en otro, sin trámites intermedios. "Para mí, un sistema con el pasaporte europeo es fundamental para un mercado único de capitales. Sin embargo, los gestores de fondos de menor tamaño nos confirman que todavía encuentran numerosas trabas para ofrecer sus productos en diferentes países", explicaba Hill.
Según indica, las principales quejas provienen de las dificultades que supone para la comercialización cross-border la injerencia de los supervisores nacionales, las tasas adicionales y los requisitos en aspectos como os distintos requisitos en material de marketing.
Atentos a la liquidez
Al igual que ya están haciendo las autoridades estadounidenses desde hace meses, la Comisión anunció también que está estudiando las posibles causas y consecuencias de la disminución de la liquidez en el mercado de bonos, especialmente en lo que se refiere a la renta fija corporativa.
De hecho, la Comisión ya ha solicitado a la Autoridad Europea ESMA un estudio más específico sobre el posible impacto en la liquidez la próxima directiva MiFID II. "Todo el mundo está de acuerdo en que ha habido un descenso, pero no hay consenso en cuanto a su causa", indicó Hill. Así, explicó que aunque algunos consideran que esa caída de la liquidez es normal, tras un exceso en los años previos a la crisis, otros aseguran que supone un serio riesgo para los inversores. "Cuando se trata de nuevas medidas legislativas, tendremos cuidado para evitar cualquier cosa que haga más difícil la situación", insistió el comisario.
Ya el mes pasado, la FCA (Financial Conduct Authority), tachó esas preocupaciones sobre la liquidez en ciertos segmentos de la renta fija como "anecdóticas", provocando las críticas de numerosas voces de la industria.