"Si analizamos la diversidad que muestran las rentabilidades de las diferentes clases de activos, vemos que puede haber grandes oscilaciones", recuerda el experto, explicando que la diferencia media entre la mejor y la peor clase de activos desde el año 2000 es del 13%, y la mayor brecha se dio en 2008, cuando las materias […]
Dirigentes Digital
| 22 ago 2016
"Si analizamos la diversidad que muestran las rentabilidades de las diferentes clases de activos, vemos que puede haber grandes oscilaciones", recuerda el experto, explicando que la diferencia media entre la mejor y la peor clase de activos desde el año 2000 es del 13%, y la mayor brecha se dio en 2008, cuando las materias primas perdieron un 18% y la deuda de los mercados emergentes avanzó un 2%.
"Todo ello demuestra la importancia de diversificar entre las diferentes clases de activos. Del mismo modo que uno no se va de vacaciones y mete solo el bañador en la maleta, conviene preparar las carteras de inversión para diferentes escenarios", indica el experto.
A su juicio, "diversificar en varias clases de activos es importante y, para los que necesitan ayudan, los fondos multiactivos pueden ser una buena opción". Para Peters, el trabajo de los expertos que gestionan estos productos consiste en determinar qué activos podrían ser los que mejor comportamiento muestren en diferentes y cambiantes entornos de mercado.
En este entorno, Nick Peters señala tres factores clave que podrían influir en la evolución de las diferentes clases de activos durante el verano:
La contradicción entre los mercados de bonos y acciones
"Aunque los rendimientos de los bonos han caído hasta niveles récord, poniendo así de relieve la demanda de seguridad entre los inversores, el S&P 500 está en máximos históricos", señala. "Es posible que los rendimientos de los bonos estén tan bajos que los inversores piensen que las rentabilidades por dividendo son más atractivas comparadas con los riesgos que rodean a los bonos. Estaremos atentos a un cambio de actitud ante la deuda pública de alta calidad".
Los datos económicos chinos
Para el experto, seguirán siendo cruciales para evaluar cómo están gestionando las autoridades la transición de su economía. "El aumento de los precios de las materias primas debería reducir la deflación de los precios a la producción y dar un empujón al sector industrial del país", indica, explicando además que "China debería estar tranquila por ahora, pero podría reactivar la volatilidad en los mercados, especialmente después de que su divisa se haya depreciado de forma constante frente al dólar durante los últimos meses".
Perspectivas de inflación
Para el experto, si la inflación repunta durante los próximos meses se avivará el debate sobre la política monetaria en EEUU Eso podría pillar desprevenidos a los mercados, "que están descontado una única subida de tipos de aquí a finales de año".