Los precios en la Eurozona han vuelto a caer en junio, hasta situarse en el 1,3% interanual, una décima por debajo de mayo. Según los datos provisionales de Eurostat, la inflación acumula ya dos meses consecutivos de descensos, lejos de los picos del 2% y 1,9% alcanzados en febrero y abril. Los precios de la energía han protagonizado la peor evolución, con una bajada del 4,5% en mayo al 1,9% en junio. Los servicios han seguido la misma tendencia, pasando del 1,6% al 1,3%, al igual que los alimentos, bebidas alcohólicas y tabaco (del 1,5% al 1,4%). En general todos los componentes han registrado tasas de variación inferiores en comparación al mes anterior. Si los datos se confirman el próximo 14 de julio, la inflación de la Eurozona se alejaría todavía más del objetivo de estabilidad perseguido por el Banco Central Europeo (BCE) del 2%. Este índice de referencia constituye una condición ‘sine qua non’ para que Bruselas retire los estímulos monetarios ‘no convencionales’ como los tipos al 0% y el programa de compra de activos. Según el último informe de ‘Perspectivas de Primavera’ de la Comisión Europea, se espera que la inflación cierre el año en el 1,6% y se ralentice hasta el 1,3% en 2018.
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