Seat prevé fabricar en la planta de Martorell (Barcelona) 480.850 coches en 2018. Significa que de la factoría barcelonesa sale un coche nuevo ensamblado cada 8 segundos. Supone un incremento del 5,5% respecto a las 456.000 unidades con las que acabará este año. La cifra es la más elevada desde 2001, cuando se alcanzaron los 480.000 coches. La planta de Martorell emplea, junto a la de componentes en El Prat de Llobregat, a casi 14.500 empleados, además de unos 100.000 puestos de trabajo directos e indirectos dependen de Seat. En otras palabras, su actividad representa un 0,8% del Producto Interior Bruto de España. El presidente del consejo de administración de Seat y vicepresidente mundial de Volkswagen, Franciso Javier García Sanz, ha expuesto las líneas de actuación de la compañía para el futuro, en donde la innovación es el principal pilar. De hecho en su planta de Martorell ya existen unos 3.000 robots. aunque la automatización no significa para Seat una reducción de puestos de trabajo. De hecho, García Sanz ha señalado que en España se crearán 1,15 millones de puestos de trabajo en áreas que todavía no existen. Entre sus planes figura continuar elaborando coches cada vez más eficientes y sostenibles. Según el vicepresidente de Volkswagen, «la sociedad demanda aire limpio, pero no ciudades vacías». Esto llegará a través de los coches eléctricos. Según sus previsiones en 2015 casi la mitad del parque automovilístico será plenamente eléctrico y libre de emisiones. Tras la presentación del ministro de Economía, Luis de Guindos, que ha puesto al sector automovilístico como ejemplo de salida de la crisis, el presidente del consejo de administración de Seat ha declarado que será difícil competir en el mercado cuando España «se sitúa en el puesto 45 de digitalización y fuera de los 100 primeros en formación profesional de los empleados». Sanz también ha hecho un llamamiento para mejorar el sistema de formación dual y el impulso del i+d para estar a la altura de los cambios en el sector. «Musk nos ha despertado a todos», ha declarado Sanz en referencia al fundador de Tesla, la compañía de coches eléctricos que produce 10.000 vehículos eléctricos al año. «Nosotros no hemos retrasado el vehículo eléctrico», ha dicho, en contestación a las declaraciones de Arias Cañete, el comisario de energía que responsabilizaba al sector de la demora en el salto al vehículo eléctrico. «Necesitamos una tecnología que nos permita unos 400 o 500 km de autonomía y eso lo tenemos ahora». Además, ha recalcado que «necesitamos una infraestructura de carga. Si no, el cliente no lo va a comprar». Asimismo, Sanz se ha comprometido a que el Grupo Volkswagen, del que es vicepresidente, cree 80 modelos eléctricos en 2025, para lo que se prepara una inversión de 20.000 millones de euros en e-mobility. El dirigente de Seat también se ha lamentado de la falta de apoyo de la industria auxiliar europea, de la que depende para producir baterías para los coches eléctricos. «Ahora mismo dependemos de Corea del Sur. Es la industria auxiliar la que ha perdido el tren». Ha hecho un llamamiento al mundo académico para impulsar la innovación y crear talento «ahora que se han perdido las cátedras de bioquímica que teníamos en Europa». Sanz ha dejado claro que llegarán a tiempo para cumplir con la normativa europea de emisiones de CO2, pero que no dejarán de producir vehículos diésel, aunque prevé una reducción cercana al 30%. «Buscamos soluciones inteligentes para mejorar el medioambiente. Las soluciones inteligentes no tienen por qué ser eliminar coches. Hay que optimizar la circulación y los aparcamientos. Lo que quieren los ciudadanos es aire limpio, no ciudades vacías», ha concluido el presidente. Cataluña El presidente del consejo de administración de Seat y vicepresidente mundial de Volkswagen, Franciso Javier García Sanz, no ve razón para cambiar la sede social de la empresa fuera de Cataluña ni mover la producción a otra comunidad, ya que confía en el arraigo de la empresa en Barcelona. «Seat es la única marca española del sector de la automoción, que está arraigada en Barcelona y no veo ninguna razón para cambiar esto», ha dicho Sanz en el Foro Europa Nueva Economía. Sanz ha vuelto a insistir en la necesidad de un marco político y judicial estable a largo plazo en Cataluña para poder continuar con normalidad su actividad. Previamente, el consejero delegado de la compañía, Luca de Meo, fue más allá y pronosticó un cese de la actividad si Carles Puigdemont era reelegido en las elecciones del 21 de diciembre.
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