En el primer trimestre del año las principales operadoras del país reajustarán sus tarifas de Internet y móvil. Es decir, llegan las subidas de precios. Pero ¿se pueden evitar? ¿Qué derechos tenemos los consumidores? Desde el comparador de ADSL HelpMyCash.com nos lo explican. Hasta abril, ningún consumidor debería considerarse a salvo de las actualizaciones en […]
Dirigentes Digital
| 22 ene 2018
En el primer trimestre del año las principales operadoras del país reajustarán sus tarifas de Internet y móvil. Es decir, llegan las subidas de precios. Pero ¿se pueden evitar? ¿Qué derechos tenemos los consumidores? Desde el comparador de ADSL HelpMyCash.com nos lo explican. Hasta abril, ningún consumidor debería considerarse a salvo de las actualizaciones en las tarifas de Internet y móvil. La primera en actualizar su escaparate ha sido Movistar, que lo seguirá haciendo a lo largo de este mes y del próximo. Y es que la azul cuenta con incrementar el coste de todas sus tarifas de Internet y fijo entre dos y cinco euros mensuales. También Orange aprovecha el cambio de año para revisar sus tarifas. En su caso, parece que se limitará a los combinados que unen fibra óptica y móvil. Eso sí, el aumento no se queda por debajo de su rival, por lo que la fuga de clientes podría ser inminente. Finalmente, Vodafone aún no se ha pronunciado. No obstante, ya se empiezan a ver los primeros movimientos que podrían indicar que se sumará a la fiesta a finales del primer trimestre, principios de abril como tarde. Ahora bien, ¿debemos aceptar este incremento de la tarifa de hasta cinco euros mensuales? ¿Existe algún truco para que a nosotros no nos afecte? Aunque como consumidores tenemos nuestros derechos, cuando la empresa cambia sus condiciones lo que hace es romper el contrato de forma unilateral. Es decir, no importa cuantas reclamaciones pongamos porque se acogen a su derecho de cambiar sus contratos y productos. Eso sí, como contrapartida, nosotros tenemos el derecho a irnos a la competencia sin que se nos puedan aplicar costes por permanencia. Huir de las subidas y ahorrar hasta 300 euros al año Dado que los cambios en las condiciones son inevitables, solo quedan dos opciones: aceptarlas o cambiar de compañía. La decisión es completamente subjetiva, ya que hay que valorar la mejora que nos harán en la tarifa y el presupuesto destinado para este servicio. No obstante, desde el comparador HelpMyCash recomiendan aprovechar esta situación para cambiar de operadora. Pese a que las tres grandes telecos nacionales son las que están en el punto de mira, el CEO del grupo MásMóvil (cuarta operadora del país) señaló recientemente que ellos mantendrían sus precios. Es decir, apostar por la amarilla, Yoigo o Pepephone podría ser la solución para este 2018. Por ejemplo, tomemos como referencia la propuesta más sencilla de Orange (Love Esencial 50 con Internet a 50 Mb, fijo y móvil con llamadas ilimitadas y 4 GB) y la de MásMóvil (Fibra 50 MÁS 4GB). En ambas obtendremos las mismas ventajas en los servicios. Sin embargo, la segunda es un 25 % más económica. O, lo que es lo mismo, 154 euros al año más barata. Es más, a falta de posibles subidas en Vodafone, si ahora mismo se quiere disfrutar de llamadas ilimitadas la tarifa mínima en Vodafone cuesta 64 euros/mes. Es decir, casi 300 euros más al cabo del año. Eso sí, en esta compañía se obtienen otros beneficios que tal vez nos compensen, como el roaming gratis en EEUU, HBO gratis durante un año (valorado en 96 euros) o el bono Chat Pass que no consume datos de nuestra tarifa cuando utilizamos WhatsApp. Ser realistas, el verdadero truco para rebajar las facturas Evitar los cambios en las condiciones de nuestras tarifas es imposible. No obstante, reducir las facturas de Internet y móvil es sencillo, tal y como hemos podido ver. El único truco es ser conscientes de lo que contratamos. Y es que en la mayoría de ocasiones las operadoras nos generan necesidades que no son reales. Por ejemplo, ¿necesitamos 10 GB en el móvil si los contenidos de mayor peso los disfrutamos en casa con WiFi? ¿Nos compensa pagar todo el año una tarifa de móvil más cara para disponer de roaming en un viaje puntual a Nueva York? En definitiva, si realmente nos molesta que nuestra operadora cambie unilateralmente las condiciones encareciendo sus tarifas hasta 60 euros anuales, pensemos si nos interesa seguir con ella. Si lo que nos ofrece lo vamos a amortizar o nos compensa tener algo más sencillo que nos permita llegar mejor a final de mes. Y es que, por muchas ventajas adicionales que ofrezca, la mayoría de usuarios no las utilizan.