El Banco Central Europeo celebrará este jueves su primera reunión de política monetaria de 2018. Los expertos coinciden en que no se esperan cambios en la política monetaria pero lo importante estará concentrado en la rueda de prensa posterior de Mario Draghi que tendrá que aclarar diversas cuestiones referentes a los futuros movimientos del organismo […]
Dirigentes Digital
| 25 ene 2018
El Banco Central Europeo celebrará este jueves su primera reunión de política monetaria de 2018. Los expertos coinciden en que no se esperan cambios en la política monetaria pero lo importante estará concentrado en la rueda de prensa posterior de Mario Draghi que tendrá que aclarar diversas cuestiones referentes a los futuros movimientos del organismo monetario que preside. Tras la publicación de las últimas actas de la reunión del BCE del pasado mes de diciembre en un tono más hawkish para algunos inversores podrían sugerir un deseo de cambiar la política monetaria para anticipar la subida de tipos de interés, de forma más controlada. Además en las últimas semanas, algunos de los miembros más importantes del BCE – especialmente Jens Weidmann, presidente del Bundesbank, y Benoît Cœuré, miembro del consejo de administración – han estado presionando al consejo para que anuncie de forma clara el final del programa de compras del BCE. Por ello desde el equipo de inversiones de imdi funds consideran que el discurso de Draghi debe servir para enfriar las expectativas de los inversores y esperan que cualquier cambio en la política de comunicación o en las guías de largo plazo de la entidad no tendrá lugar, al menos, hasta el próximo encuentro de marzo. En este sentido, Nick Peters, gestor multiactivos de Fidelity, destaca que el hecho de debatir sobre los tipos señalaba el fin del QE en septiembre, en vez de postergarlo a final del año. “Aunque una política monetaria más estricta podría ser apropiada, con la economía de la eurozona creciendo sobre la media, diversos portavoces del BCE han mostrado en los últimos quince días su preocupación por la fortaleza del euro. Será interesante ver con qué parte de este razonamiento se quedará Draghi en la rueda de prensa” añade Peters. Para Franck Dixmier, Director de Renta Fija de Allianz Global Investors, los inversores esperan un cambio en la orientación de las expectativas (‘forward guidance’), y un anuncio sobre el final de su programa de compras de valores. “Hasta ahora, el BCE ha defendido que su interés por mantener su programa de compras se justifica porque las perspectivas de inflación se mantienen por debajo de los objetivos del banco a medio plazo. De hecho, a pesar de un fuerte y estable crecimiento económico en toda la eurozona, las perspectivas de inflación parecen mantenerse por debajo del objetivo del 2%” aclara Dixmier. Desde Allianz GI creen poco probable que el BCE suba los tipos antes de 2019 debido a la extrema sensibilidad de los mercados de renta fija a una normalización en la política monetaria se reflejó recientemente por el aumento de los rendimientos a largo plazo de EE. UU y las turbulencias que se desencadenaron después de que el Banco de Japón anunciara los planes para reducir ligeramente la compra de bonos. En este punto coincide François Rimeu, responsable de Cross Asset y Rendimiento Total de La Française, espera que Draghi sea constructivo respecto al crecimiento, pero muy cauto entorno a la inflación y podría mencionar el aumento del tipo de cambio como un riesgo sobre la inflación. El mercado ya ha descontado algunas subidas de tipos para final de año (5-6 puntos básicos), lo que parece poco probable si se tienen en cuenta las orientaciones pasadas del BCE. En un contexto más amplio, la divergencia entre las políticas monetarias europeas y estadounidenses durante 2018 es cada vez más clara. Mientras se espera que el BCE deje los tipos sin cambios hasta 2019, la Reserva Federal los puede llegar a subir hasta tres o cuatro veces este año. Esto supondría una sorpresa para los mercados, que actualmente sólo esperan dos subidas”. Para Vincent Reinhart, economista jefe de Standish, parte de BNY Mellon, el Banco Central Europeo va retrasado respecto a la Fed, pues acaba de anunciar la decisión de frenar las compras netas de activos, que recortará de 60.000 a 30.000 millones de euros al mes a partir de enero de 2018. “Esta cascada indefinida de medidas implica que ciertos elementos no convencionales seguirán estando presentes en la política del banco más allá de octubre de 2019, el mes en que finaliza el mandato de su actual presidente, Mario Draghi” aclara Reinhart. La fortaleza del euro se volverá a interponer en los planes del BCE Según destacan desde el equipo de inversiones de imdi funds, a la sombra de una incómoda fortaleza del euro, su máximo objetivo será contener la evolución de la divisa comunitaria y, en esta línea, el presidente de la autoridad monetaria hablará de “sobre reacción del mercado” ante ciertas informaciones conocidas. Los mensajes lanzados desde el BCE, junto al acuerdo político alcanzado en EEUU, deberían servir para contener la cotización del euro frente al dólar durante los próximos días. Draghi dará un paso atrás respecto a lo apuntando en las últimas actas de la entidad, aunque los indicadores continuarán señalando un desempeño positivo de la actividad global y, en concreto, de la eurozona. No obstante, todavía existe margen antes de asistir a niveles del euro que sean contractivos para la actividad real, debiendo tomar perspectiva más allá de los tipos de cambio nominales y el cruce frente al dólar. “Cabe señalar que Draghi ya está volviendo a poner a los tipos de interés en el centro de la política monetaria en detrimento de las compras de activos, lo cual será una constante en los próximos meses de cara a un encuentro de junio del BCE en el que se puede poner fecha de caducidad a las compras de activos. No obstante, la normalización de la política monetaria en la UEM llevará mucho tiempo y las subidas de tipos distarán de ser tempranas en el área, llegando a comienzos de 2019 en forma de alza del tipo de la facilidad de depósito” aclaran desde imdi funds.