El inmobiliario español consiguió en 2016 iniciar los primeros avances hacia la recuperación, aunque no a la misma velocidad en todos los puntos del país. Según el último informe de Tinsa “Radiografía del stock 2016”, el año pasado registró las primeras subidas de precios en el inmobiliario de grandes ciudades y ciertos enclaves de la costa, y contundentes crecimientos a nivel nacional de compraventas, hipotecas y visados de obra nueva en tasa interanual. Sin embargo, España sigue sin absorber el exceso de obra nueva construida desde el estallido de la crisis. El país aún no ha conseguido dar salida a 340.000 viviendas construidas desde 2008, una cifra elevada pero que significa un descenso del 12% en comparación con 2015. En la Radiografía del stock 2016, los expertos señalan que el 54% de los 8.000 municipios españoles no presenta problemas de stock de obra nueva, ya que sea porque prácticamente no ha tenido actividad de construcción residencial desde 2008 (11,5%) o porque menos del 10% del parque construido desde 2008 sigue vacío. En el último año ha caído ligeramente la proporción de municipios con problemas graves de stock (que tiene más del 30% de las viviendas construidas desde 2008 vacías), de un 21% en 2015 hasta un 20% en 2016. Los motivos del exceso de oferta Desde Tinsa explican que la situación del empleo en España es parte del problema del exceso de oferta: “Existe una demanda embalsada de vivienda que sigue sin tener acceso, ya sea porque no tiene empleo estable o su salario es insuficiente, y además, no dispone de ahorros para plantear la compra de una vivienda”. «Hemos de ser conscientes de que la recuperación total [del inmobiliario] pasa también por la economía de las familias, la cual está aún experimentando un crecimiento sostenido de las rentas», opina a este respecto Emiliano Bermúdez, portavoz y subdirector de donpiso a DIRIGENTES. Además de estos motivos, desde Tinsa explican que el stock no se reduce, además, porque en paralelo se siguen construyendo viviendas, concretamente cifra en 63.000 las viviendas que se están construyendo actualmente. “En el año último año la cifra de nuevas viviendas terminadas se acercaría a 40.000, que se sumarían al parque existente de nueva vivienda”, recoge el informe. En esta línea opina Bermúdez, quien señala que la recuperación inmobiliaria se hará de forma controlada y paulatina, pero ya entre enero y septiembre 2016 se registró un aumento del 32,2% de los visados autorizados para obra nueva de uso residencial en España. «Sigue habiendo una alta demanda para obra nueva que el sector va a absorbiendo poco a poco», explica Bermúdez. 
Durante la presentación del Barómetro de Tendencias Inmobiliarias de CBRE también se hizo mención a la situación del exceso de stock en España. Adolfo Ramírez-Escudero, presidente de CBRE España, y Lola Martínez, directora de Research de la compañía, apuntan a que se sigue construyendo vivienda nueva porque, en algunos casos, la oferta no coincide con lo demandado por los ciudadanos, por lo que se exige la construcción de nueva oferta que satisfaga sus demandas. Junto a esto, Tinsa explica que no todo el stock de vivienda nueva se está comercializando, ya que a veces los propietarios no pueden venderlas o deciden no hacerlo por algún motivo. Los expertos de Tinsa señalan que solo en el 20% de los municipios españoles se está comercializando la sobreoferta de vivienda nueva. Entre las causas por las que no se están ofertando algunas viviendas se encuentran, por ejemplo, el deterioro, la ocupación ilegal o los problemas judiciales. El interés de los propietarios por esperar a una recuperación de los precios ocurre en algo más del 10% de los municipios españoles, según Tinsa. «Lo importante es que estamos en la buena dirección y que es cuestión de tiempo que se dé salida a la obra nueva. 2015 fue el año bisagra en el mercado inmobiliario de nuestro país, 2016 ha sido la consolidación y el 2017 será el año del crecimiento«, concluye Bermúdez, subdirector de donpiso.
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