En concreto, la firma ostenta ahora una participación total del 3,240% (3,007% más 0,233% adicional vía instrumentos financieros, frente al 3,028% (2,754% y 0,274%, respectivamente) comunicado a la CNMV en abril.
ACS cerró el primer trimestre de 2016 con un beneficio de 220 millones de euros, lo que supone un incremento del 6% con respecto al mismo periodo de 2015.
Si bien, su cifra de negocio se redujo un 7,6%, hasta 7.922 millones por el descenso de la actividad de su filial australiana. Por el contrario, la alemana Hochtief aportó 45 millones euros en el primer trimestre, que supone un 41% más que el año pasado.
Por su parte, el EBITDA alcanzó los 597 millones, lo que supone un descenso del 9,5%, afectado por la venta de activos renovables en el primer trimestre de 2015. Mientras, la deuda neta se situó en 3.840 millones, un 0,4% más.
A principios de abril, la compañía vendía el 1,4% que le quedaba de Iberdrola a 6,02 euros por título, lo que supuso un beneficio antes de impuestos de 95 millones.
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