A fines de este año debe estar terminado el estudio de factibilidad que China y Uruguay acordaron realizar como paso previo a un Tratado de Libre Comercio (TLC). Las autoridades locales buscan determinar cuáles sectores serán beneficiados y perjudicados. Tal análisis es de gran interés para el agro y la industria, actividades que a priori […]
InternacionalDirigentes Digital
| 11 oct 2021
A fines de este año debe estar terminado el estudio de factibilidad que China y Uruguay acordaron realizar como paso previo a un Tratado de Libre Comercio (TLC). Las autoridades locales buscan determinar cuáles sectores serán beneficiados y perjudicados.
Tal análisis es de gran interés para el agro y la industria, actividades que a priori serían más impactadas de manera positiva y negativa, respectivamente, según señalan especialistas. El balance final, en tanto, sería positivo, evalúan preliminarmente.
El sí de Beijing
El levantamiento forma parte de las negociaciones formales que inició Uruguay después de que su presidente, Luis Lacalle, anunciara el 7 de septiembre haber recibido una respuesta positiva del Gobierno de Xi Jinping para avanzar en esa dirección.
“Ha habido una histórica vocación de nuestro país de pertenecer al Mercosur y al mismo tiempo de abrir nuestro mercado a distintos países”, dijo Lacalle, reafirmando que su gestión (liberal) continúa lo hecho por el presidente anterior, Tabaré Vázquez (izquierda).
Pero también lo decía en alusión a las resistencias que enfrenta en el Mercosur, puntualmente de Argentina, para avanzar en negociaciones fuera del bloque, cuestionamientos que el mandatario uruguayo calificó -en una cumbre a inicios de año- de “lastre”.
Los números
El objetivo final “y quizá el más importante”, dijo al día siguiente el secretario de la Presidencia, Álvaro Delgado, es que Uruguay “sea puerta de entrada del Mercosur en China, con el Mercosur mismo”, buscando así resaltar los beneficios de tal acuerdo.
Según datos oficiales de Uruguay, China es el principal destino de sus exportaciones (un 30%) desde 2013, la mayoría materias primas. En 2021, hasta agosto, los despachos llegaron a 1.568 millones de dólares, un 63% más que en igual periodo de 2020.
Tan sólo en el segundo trimestre de 2021, las ventas de carne vacuna representaron 351,4 millones de dólares, según un informe de la Universidad Católica local. El país sudamericano quiere también avanzar en servicios, tecnologías, turismo y electrónica, atrayendo además inversiones en infraestructura.
Desventaja y aranceles
Del lado negativo, habrá consecuencias para los sectores “vestimenta, cuero, zapatos”, le dijo Gabriel Rozman, presidente de la Cámara de Comercio Uruguay-China, al portal América Economía, sugiriendo al mismo tiempo que tal desventaja podría compensarse usando los aranceles que se dejarían de pagar para reconvertir a esas empresas.
En materia de aranceles, precisamente, que es uno de los temas sensibles del Mercosur, Argentina finalmente acordó con Brasil el viernes (8) reducir el Arancel Externo Común (AEC) en un 10%, manteniendo excepciones en calzados, textiles y automotriz.
El acuerdo, que aún debe ser aprobado por los restantes socios, fue calificado por los firmantes como un avance “importante” para el aumento de la competitividad y para impulsar “una inserción beneficiosa de la producción del Mercosur en las cadenas globales de valor”.
Hasta este domingo, las autoridades de Uruguay no se habían manifestado al respecto.