El aumento de los disturbios, protestas y huelgas amenaza la contabilidad de las empresas

Desde la pandemia, la frustración por los problemas socioeconómicos se han exacerbado en muchos lugares del planeta, lo que ha aumentado el número de disturbios y protestas, a la vez que ha contribuido al aceleramiento de la pérdida de confianza en gobiernos e instituciones públicas que ya se daba desde la Gran Recesión. Además, la polarización social también ha contribuido al número creciente de disturbios. 

Así al menos se recoge en el informe Strikes, riots and civil commotion – a test of business resilience (Huelgas, disturbios y conmoción civil: una prueba de resiliencia empresarial) realizado por la compañía aseguradora Allianz. En él se estima un coste de 12.000 millones de dólares para las empresas a nivel mundial por este tipo de acontecimientos sucedidos en el último lustro. De hecho, las revueltas civiles (39%) y las huelgas (30%) se sitúan entre las principales preocupaciones a nivel mundial para los dirigentes encuestados. 

Entre otros datos, el estudio revela que, desde 2017, más de 400 protestas antigubernamentales de tamaño relevante han estallado en todo el mundo en más de 130 países (135 de carácter antigubernamental y socioeconómico). También se resalta que el 23% de las mismas han tenido una duración superior a tres meses. Se han producido 135 protestas antigubernamentales económicas significativas desde 2017.

Más del 50% de las protestas antigubernamentales a nivel mundial en 2022 fueron provocadas por problemas económicos. Si este dato no fuera preocupante, se espera que los disturbios civiles sigan siendo motivo de preocupación durante 2023, ya que la confianza en la economía se ha derrumbado a nivel mundial, según el Edelman Trust Barometer de 2023, cayendo del 50% al 40%. 

La mitad de los países encuestados mostraron una disminución de dos dígitos interanual en la creencia de que sus familias mejorarán económicamente durante los próximos cinco años. Hay algunas señales más esperanzadoras de que el aumento del coste de vida puede estar llegando a su punto máximo: el 68% de los economistas consultados por el Foro Económico Mundial (FMI) esperan que la crisis sea menos severa para fines de 2023 y dos tercios son optimistas sobre la evolución de la crisis energética para finales de año.

Cómo afectan las huelgas a los negocios

Según se señala en el informe, las huelgas y disturbios puede afectar a las empresas de muchas maneras. Aquellos negocios que se encuentran en las inmediaciones de los disturbios pueden sufrir pérdidas por interrupción del negocio y daños materiales a la propiedad o los activos, a lo que hay que sumar daños indirectos en forma de pérdida de atractivo o la obstaculización del acceso a sus instalaciones.

También se indica que, dado que los disturbios ahora pueden propagarse más rápida y ampliamente, gracias en parte al poder de las redes sociales, los costes financieros subsanar sus efectos están aumentando. Además, hay que sumar el gasto al que tienen que hacer frente las aseguradoras para cubrir los daños ocasionados.

Entre los ejemplos de disturbios o protestas que más daños han ocasionado a las organizaciones empresariales, el informe destaca las revueltas de Chile y Colombia en 2019 y 2021, respectivamente. En ambos casos, el coste estimado se sitúa en 3.000 millones de dólares.