La directora del Instituto de Transición Justa, Laura Martín, afirmó hoy que “la transición energética es, principalmente, una oportunidad de empleo en España, por eso desde el gobierno apostar por la transición energética es apostar por más y mejores empleos”. Martín, junto al presidente de Fundación Naturgy, Rafael Villaseca, fue la encargada de abrir hoy […]
Las empresas hablanDirigentes Digital
| 31 ene 2022
La directora del Instituto de Transición Justa, Laura Martín, afirmó hoy que “la transición energética es, principalmente, una oportunidad de empleo en España, por eso desde el gobierno apostar por la transición energética es apostar por más y mejores empleos”. Martín, junto al presidente de Fundación Naturgy, Rafael Villaseca, fue la encargada de abrir hoy la jornada “Transición energética y oportunidades de empleo”, organizada por la fundación de la compañía energética.
Martín destacó que “investigar y reflexionar sobre los nuevos perfiles necesarios es clave para transformar las oportunidades en realidad”. Según Martín, la transición energética requerirá un impulso tremendo para la recualificación empleo, de forma que se puedan aprovechar las nuevas oportunidades en los sectores de las renovables, el hidrógeno, el almacenamiento energético y la rehabilitación energética.
En este sentido, Martín hizo hincapié en las personas afectadas por la reconversión del sector, que son “muy valiosas porque ya disponen de conocimientos en energía”, y destacó la importancia de la Formación Profesional como una herramienta para fomentar el empleo juvenil. “Por eso ha sido fundamental la nueva ley de FP, es estratégica para el país y una palanca de crecimiento económico y cohesión social”, afirmó
Yolanda García, jefa de unidad adjunta de Coordinación de Política Energética, Estados Miembros y Relaciones Interinstitucionales de la Dirección General de Energía de la Comisión Europea, insistió, en la clausura de la jornada, en la necesidad de “anticipación para identificar las nuevas necesidades del mercado, porque de lo contrario, la falta del capital humano ralentizaría el cumplimiento de los objetivos ambientales de la UE”.
Según García, la CE estima que la transición verde podría crear 1 millón de puestos de trabajo adicionales en 2030 y unos 2 millones en 2050, y “este rápido crecimiento requiere de un readiestramiento en todas las nuevas competencias y habilidades”. En este sentido, destacó el papel del Pacto por las Habilidades de la UE, que apoya este proceso creando alianzas entre todos los agentes implicados.
Al hilo de una de las conclusiones del estudio presentado en la jornada, García afirmó que “España se encuentra entre las primeras posiciones a nivel internacional en el desarrollo de renovables, con el consiguiente impacto que esto tiene en el empleo, lo que representa una oportunidad también para alcanzar objetivos climáticos, de recuperación económica y de liderazgo de la industria española”.
Por su parte, Villaseca afirmó que “estamos en un sector en enorme y profunda transformación, con riesgos pero también con muchas oportunidades, que hay que aprovechar, y una es sin duda la generación de empleo, y para ello tendremos que tener presente los requisitos de formación, habilidades y capacidades que se van a requerir”. “Tenemos un gran reto, la transición debe ser no solo un elemento de lucha contra el cambio climático, sino también para la recuperación y la inclusión de los colectivos más vulnerables”, añadió.
Expertos de diferentes ámbitos coincidieron en la necesidad de que todos los agentes sociales implicados, desde las administraciones, los centros educativos, las empresas y las organizaciones sociales, trabajen de forma coordinada para aprovechar las oportunidades de nuevos empleos que ofrece la transición energética.
El director general de la Fundación Exit, Nacho Sequeira, abogó por una “transición energética justa e inclusiva” y destacó la importancia de los ciclos formativos de grado medio vinculados a la eficiencia energética, energías renovables y movilidad sostenible, en la creación de empleo en el escenario actual. “Los jóvenes necesitan mensajes retadores pero alcanzables, para que no perdamos al 16% de alumnos que no superan la ESO”. Sequeira hizo un llamamiento a fomentar la FP Dual y los contratos de aprendizaje, y a que “las grandes empresas involucren a sus proveedores en la contratación de colectivos más vulnerables”.
Por su parte, Natalia Peiro, secretaria general de Cáritas Española, afirmó que para que Europa sea verde, digital y social, “las administraciones tienen que favorecer que las personas con menos empleabilidad puedan acceder al mercado laboral, las organizaciones sociales debemos estar más cerca de las empresas y conocer sus necesidades de una manera más ágil, y las empresas deben dar la oportunidad a los colectivos más vulnerables para que puedan acceder a los nuevos puestos de trabajo”.
Desde el ámbito universitario, Mercè Segarra, vicerrectora de Emprendimiento, Innovación y Transferencia de la Universidad de Barcelona, explicó que “los jóvenes tienen que encontrar su vocación y para eso tienen que ver todas las posibilidades de formación en cualquier nivel educativo. Por ello, desde la UB estamos apostando por las prácticas externas curriculares y extracurriculares”. En relación a las nuevas oportunidades de empleo, afirmó que “para que la transición sea justa e inclusiva tenemos que colaborar todos los agentes del sistema”.
Eva Buch, responsable de Educación y Divulgación de Fundación Naturgy, destacó que “la transición energética y la oportunidad de empleo que representa necesita de la alianza y colaboración de empresas, entidades y administraciones para que sea una realidad”. En este sentido, recordó que “desde Fundación Naturgy, entre otras acciones, estamos trabajando con las administraciones para actualizar los contenidos curriculares de la FP, apoyamos la recualificación de los profesionales que se han visto afectados por el cierre de centrales térmicas, y atendemos a otros colectivos vulnerables, y sin cualificación relacionada con el sector, con formaciones como la de asesoría energética en entornos vulnerables”.
Hugo Lucas, jefe de Comunicación y Relaciones Institucionales del IDAE, destacó la importancia que van a tener en un futuro inminente los empleos ligados a nuevas tecnologías, como la movilidad eléctrica; a la integración de la energía en otras áreas profesionales, como la arquitectura o la mecánica; y a la digitalización en el ámbito energético”.
En la jornada organizada por Fundación Naturgy, se presentó el estudio “Empleos que demandará el sector energético: nuevas oportunidades sostenibles”, elaborado por la Cátedra de Sostenibilidad Energética del IEB-Universitat de Barcelona, que coloca a España como el segundo país europeo con más demanda de profesionales energéticos, después de Alemania, y seguido de Francia, Reino Unido e Italia. Estos cinco países concentraban más de la mitad de los nuevos puestos de trabajo en tecnologías verdes en 2018.
Transformación tecnológica, energías renovables, eficiencia energética, finanzas verdes y sostenibilidad, y orientación al cliente son las cinco especialidades más demandadas por las empresas energéticas en el marco de la transición energética actual, según el estudio dirigido por la catedrática María Teresa Costa.
Los autores identifican los nuevos perfiles profesionales del sector y sostiene que para que la transición energética sea también un éxito en el ámbito laboral, las administraciones deben estrechar lazos entre los centros educativos y el mercado laboral, actualizando la oferta educativa; fomentar las soft skills en los estudios; avanzar en el desafío de la educación STEM; y apostar por una Formación Profesional de calidad e innovadora, entre otras medidas.
La transición hacia un modelo energético verde y sostenible constituye una oportunidad para la economía española pero todo proceso transformador conlleva a su vez unos riesgos. Entre los colectivos más afectados, el informe identifica los trabajadores con bajos niveles formativos y de competencias; los trabajadores de tecnologías obsoletas dentro de la Agenda Verde 2050 –por ejemplo, centrales térmicas de carbón o petróleo–; y los trabajadores de la industria energética afectados por la deslocalización de procesos y con limitaciones para la movilidad geográfica.
El informe forma parte de las actividades de divulgación de la Fundación Naturgy sobre temas relacionados con el sector energético. Todas sus publicaciones se pueden consultar en el Centro de Conocimiento de su web. La Fundación, creada en 1992 por la compañía energética, también desarrolla programas de acción social, que inciden especialmente en actuaciones para paliar la vulnerabilidad energética.