El crecimiento económico de España se ralentizará más de lo esperado, según reconoce también el Gobierno del socialista Pedro Sánchez. La ministra de Economía, Nadia Calviño ha presentado el cuadro macroeconómico en el que se prevé una reducción de una décima tanto en 2018 como en 2019 con respecto a la anterior previsión. De esa […]
NacionalDirigentes Digital
| 15 oct 2018
El crecimiento económico de España se ralentizará más de lo esperado, según reconoce también el Gobierno del socialista Pedro Sánchez. La ministra de Economía, Nadia Calviño ha presentado el cuadro macroeconómico en el que se prevé una reducción de una décima tanto en 2018 como en 2019 con respecto a la anterior previsión. De esa forma, este año el PIB crecerá un 2,6% y un 2,3% en 2019.
Hay que precisar que estas cifras están en consonancia con los pronósticos del Banco de España, entre las más cautelosas de todos los organismos que han publicado sus cálculos para la economía de nuestro país. De hecho, el FMI, la Comisión Europea y la OCDE estiman que el crecimiento de España se mantendrá por encima del 2,7%.
En lo que respecta a la tasa de paro, a finales de 2018 se mantendrá en el 15,5%, mientras que en 2019 descenderá por debajo del 14%, en el 13,8%. La presentación de estas previsiones se ha producido en el marco del Consejo Extraordinario que ha aprobado el borrador de los Presupuestos Generales del Estado para 2019. Tanto el borrador como el cuadro macroeconómico se remitirán a la Comisión Europea que, según el Gobierno, dará el visto bueno.
Calviño defiende los Presupuestos presentados por el ejecutivo socialista, tanto con respecto a Bruselas como a los mercados financieros: “No veo por qué tendría que haber ningún tipo de duda con respecto a los mercados financieros”. Además, cree que la subida del salario mínimo “no tendrá impacto sobre el crecimiento económico y sí sobre la renta disponible”.
Por su parte, la ministra de Hacienda afirma que los presupuestos “cambian el paso”, y que el déficit presupuestado por el anterior Gobierno era “una falacia”. Mientras que se esperaba cerrar 2018 en el 2,2%, María Jesús Montero ha precisado que la desviación advertida es del 2,7% en 2018. Aun así, afirma que “a Bruselas se le da el ajuste estructural que Bruselas nos pide”.
Además, ratifica que “el Gobierno está cumpliendo con el ajuste estructural”, y que renunciar al margen de déficit que permite Bruselas “no ha ocurrido nunca”. “Es impensable que un país que tiene capacidad de mayor margen no lo aproveche”, ha considerado Montero. No obstante, cree que “si se hubiera hecho un presupuesto que fuese hacia el 2,2% estaríamos hablando del 1,3 el año que viene”, mientras que se calcula que será del 1,8% en 2019.