Casi una década después del comienzo de la crisis económica, a rasgos generales, el mercado de trabajo presenta un escenario totalmente diferente al de hace diez años. Una reforma laboral y la irrupción tecnológica son algunos de los cambios más significativos que han tenido lugar desde 2008, tiempo en el que ha entrado a trabajar […]
NacionalDirigentes Digital
| 06 nov 2018
Casi una década después del comienzo de la crisis económica, a rasgos generales, el mercado de trabajo presenta un escenario totalmente diferente al de hace diez años. Una reforma laboral y la irrupción tecnológica son algunos de los cambios más significativos que han tenido lugar desde 2008, tiempo en el que ha entrado a trabajar prácticamente una generación entera.
Así, mientras la economía española prosigue su proceso de recuperación, algunos aspectos del mercado laboral no parecen ofrecer los mismos síntomas. Según el informe ‘Avance del mercado laboral’, elaborado por Analistas Financieros Internacionales (AFI) y Asempleo, el crecimiento en la ocupación ha ido de la mano de un aumento de la sobrecualificación, especialmente en este último año.
En concreto, el número de trabajadores que ocupa puestos que no se adecuan a sus capacidades y formación ha crecido un 0,6% desde finales de 2016 y ya representan el 53,9% de la fuerza laboral. “Una situación preocupante y cuya persistencia podría constituirse como un indicador de la ineficiencia del mercado de trabajo”, aseguran en dicho informe.
En este sentido, los infracualificados se han mantenido estables entorno al 3,6%, mientas que los cualificados han experimentado un avance del 1,2%. Sin embargo, éstos últimos han reducido su participación sobre el total de trabajadores en siete décimas, hasta el 42,5% de los cotizantes.
Las mujeres y jóvenes de entre 16 y 24 años son los colectivos más afectados por esta tendencia. De hecho, si bien se ha incrementado un 3% tanto en hombres como en mujeres, la brecha de género entre ambos alcanza el 10%. Así, mientras afecta a un 49,3% de ellos, en el caso de las féminas se ha disparado hasta el 59,4%.
Por tramos de edad, las diferencias también son significativas. Desde octubre de 2016, las personas de entre 16 y 24 años son los que más han contribuido al crecimiento del empleo, con un 20,6% de la fuerza laboral se trata del segmento que presenta mayores tasas de paro, pero también de sobrecualificación. Según dicho estudio, un 66,4% de las personas con dicha edad que trabaja la sufre.
La industria extractiva y los servicios profesionales son los sectores donde más han aumentado los cualificados en estos años, pero también presentan un mayor desajuste con un 7,2% y un 5,3%, respectivamente. Desde Asempleo destacan el papel que juegan los contratos temporales y que han permitido reducir la sobrecualificación desde el 14,4% durante el cuarto trimestre de 2016. En el caso de los contratos indefinidos sucede lo contrario: solamente el 1,5% de los contratos firmados durante el período analizado están cualificados de manera adecuada.
Una tendencia que afecta a los trabajadores en función de la comunidad autónoma en la que trabajen. Así la Comunidad de Madrid es la región que presenta un mejor ajuste entre formación y empleo, mientras que Islas Canarias registra el mayor desajuste con crecidas del 5,3%. Aunque son Islas Baleares (+7,4%) y Extremadura (+7%) donde más repunta este fenómeno. En el lado opuesto se encuentran Navarra y Asturias donde ha disminuido un 1,2% y un 0,8%, respectivamente.
De manera paradójica, las comunidades autónomas que registran menores tasas de paro son las que presentan tasas más altas de sobrecualificación. Se trata de País Vasco (59,4%), Cantabria (58%) y La Rioja (56,4%).