Renfe ha puesto en marcha una experiencia piloto que permitirá que personas con capacidades diferentes puedan tener acceso a la información sobre los diferentes elementos y servicios disponibles en las estaciones.
La estación de Cercanías de Soto de Henares y las salas club y de embarque de Puerta de Atocha han sido los lugares elegidos para llevar a cabo este experimento basado en un sistema de marcadores digitales y que estará disponible desde finales de julio.
Para ello, los usuarios interesados deberán descargarse la aplicación NaviLens que recoge los datos relevantes adaptados en diferentes formatos en función de las diversidades funcionales (visuales, auditivas o cognitivas). La idea pasa porque estas personas tengan la posibilidad de moverse de manera totalmente autónoma por las estaciones.
Así, la herramienta ofrece información locutada para los viajeros con discapacidad visual o en formato vídeo. Permite, además, configurar la aplicación en el mismo idioma que el dispositivo móvil.
La Universidad de Alicante y la empresa Neosistec son las organizaciones que se encuentran detrás de esta solución tecnológica. Con ello, se abre un mundo de posibilidades en el campo de utilidades y aplicaciones en el terreno de la información para usuarios.
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