La actividad económica se desacelerará en 2019 y a partir de ese momento se mantendrá estable, al tiempo que las inflación aumentará “lentamente” a medida que se incrementa la capacidad de reserva. Esta es la principal conclusión que se desprende del Boletín Económico que elabora el Banco Central Europeo (BCE). La maduración del ciclo económico, […]
NacionalDirigentes Digital
| 27 dic 2018
La actividad económica se desacelerará en 2019 y a partir de ese momento se mantendrá estable, al tiempo que las inflación aumentará “lentamente” a medida que se incrementa la capacidad de reserva. Esta es la principal conclusión que se desprende del Boletín Económico que elabora el Banco Central Europeo (BCE).
La maduración del ciclo económico, la retirada de los estímulos por parte de los bancos centrales, así como el impacto de los aranceles entre China y EE.UU. son algunos de los factores que provocarán dicha situación. “El crecimiento del comercio mundial se ha desacelerado un poco y han aumentado las incertidumbres sobre las relaciones comerciales futuras”, añaden.
En este sentido, consideran que si bien la actividad económica se ha mantenido “resistente”, ésta se ha vuelto más desigual y han aparecido “signos de impulso moderador”. Un aspecto al que también han afectado las condiciones financieras de las economías avanzadas. No ha ocurrido así en los mercados emergentes, donde parece que se han ajustado.
Tras dos trimestres consecutivos registrando un crecimiento del 0,4%, la economía de la Eurozona ha perdido impulso en el último trimestre, con un avance del 0,2%. Y a pesar de debilitarse la demanda externa por factores específicos de cada país y sector, se espera que sea ésta la que continúe respaldando la economía de la zona euro.
En este sentido, las proyecciones macroeconómicas realizadas por los expertos del Eurosistema estiman cerrar el año con un aumento del PIB real anual del 1,9%; 1,7% en 2019 y 2020 y del 1,5% en 2021. Todos ellos revisados a la baja como consecuencia del proteccionismo, la persistencia de incertidumbres relacionadas con factores geopolíticos, las vulnerabilidades de los mercados emergentes y la volatilidad de los mercados financieros.