Las previsiones macroecónomicas previstas para España por diferentes organismos han empeorado. También las de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), que apuntan a la “incertidumbre política”, que lleva a un mayor ahorro y, por tanto, un menor consumo, como uno de las causas. Otro es el impacto del Brexit en el […]
NacionalDirigentes Digital
| 21 nov 2019
Las previsiones macroecónomicas previstas para España por diferentes organismos han empeorado. También las de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), que apuntan a la “incertidumbre política”, que lleva a un mayor ahorro y, por tanto, un menor consumo, como uno de las causas. Otro es el impacto del Brexit en el turismo.
Como consecuencia, el organismo rebaja al 2% la previsión del PIB para 2019. Crecerá en 2020 y 2021 al 1,6%, tres décimas menos de lo que se esperaba. El frenazo de la economía afectará a diferentes variables. Las más perjudicadas se encuentran en materia de empleo y déficit.
La OCDE espera que el mercado laboral español sufra un estancamiento. Tras siete años con un aumento cada vez mayor a nivel interanual de la tasa de empleo, el ritmo de crecimiento disminuirá. Ahora, la tasa de paro pasará del 14,2% en 2019 al 14,1% en 2020 y al 13,6% en 2021.
Las previsiones de la OCDE calculan también que la deuda pública española será del 96,6% del PIB en 2019, dos décimas más de lo esperado. En los dos años siguientes, estime que serán del 96,4% en 2020 (medio punto más) y el 96,2% (casi un 1,5% más) en 2021.
Así, se suma a la advertencia de Bruselas de que es “clave” una mejora en el equilibrio fiscal con el fin de paliar esta situación.