El hecho de que a una semana de la apertura del “Autosalon” de Genf, Suiza con solo 12 infectados del coronavirus, haya prohibido la celebración de reuniones con una afluencia superior a las 1.000 personas tendrá un efecto dominó en Europa. Alemania ya ha reaccionado y anula la feria de turismo ITB en Berlín, la […]
NacionalDirigentes Digital
| 28 feb 2020
El hecho de que a una semana de la apertura del “Autosalon” de Genf, Suiza con solo 12 infectados del coronavirus, haya prohibido la celebración de reuniones con una afluencia superior a las 1.000 personas tendrá un efecto dominó en Europa. Alemania ya ha reaccionado y anula la feria de turismo ITB en Berlín, la más grande del sector a nivel mundial. Estas cancelaciones multimillionarias dañarán todavía más aún por el cambio climático que debilita el sector del automóvil y del turismo. El ministro alemán del Interior, Horst Seehofer (CDU), había ya recomendado desde hace algunos días la cancelación de la ITB. Aunque todavía en Alemania nadie de los alrededor de 50 infectados con el coronavirus ha muerto, el riesgo en una feria turística tan grande con representantes de las regiones afectadas y con 150,000 visitantes esperados no es calculable según el ministro del Interior. Para las Islas Baleares y España en su total, la feria que debería haber comenzado la semana que viene, es una de las fechas más importantes del año para promocionar nuevos destinos y hoteles. En una entrevista al diario alemán “Handelsblatt” una catedrática de medicina ya ha alertado que será mejor cancelar todos los eventos de gran escala lo que podría afectar como en Suiza también a partidos de fútbol para restringir la epidemia del Covid-19.
Todo esto pone en evidencia el verdadero peligro que sufrimos ahora: nos come el pánico. La cancelación de los expositores grandes tiene un efecto dominó para la organización de una feria, igual que se ha vivido ya en Barcelona con el Mobile World Congress. La crisis del coronavirus limpiará el sector del turismo rápidamente. Algunas agencias ya especializadas en viajes a China están ya en bancarrota, y para algunas aerolíneas la situación es cada vez más crítica. Algunas empresas aprovechan la corriente y anulan ahora también su participación en citas sectoriales y comerciales que solamente tienen lugar en mayo o más tarde, cuando esperamos que el problema del coronavirus ya se habrá arreglado. Estas decisiones se basan en la estrategia de evitar más gastos en caso de infecciones, pero para algunas empresas que tienen los seguros correspondientes el coronavirus también es la perfecta excusa para no ir a una feria y así ahorrar milliones de euros.
230 ferias ya se han cancelado a nivel mundial
En los últimos meses se han cancelado 230 ferias, 50 de ellas en Italia. Más allá del coronavirus el futuro del negocio de conferencias y ferias internacionales es inseguro ahora. Tenemos la experiencia con la feria de referencia del sector IT, la alemana Cebit, que murió “gracias” a la crisis financiera. Una vez cancelada las empresas pensaron si al año siguiente realmente era necesario ir, si el hecho de no estar no había afectado de verdad a sus ventas. Además, hay gente que cree que las ferias presenciales ya son redundantes considerando la tecnología que hay para organizar videoconferencias. Era una razón por la cual el Ministro de Cooperación Internacional alemán no fue a la COP25 en Madrid en diciembre del año pasado: “Este tipo de encuentros ya no son adecuados en tiempos del cambio climático”, decía en una entrevista.
Con una recesión mundial ya en el horizonte hay empresas que reconocen que los gastos para estos mega eventos crecen de año en año y ponen en duda su utilidad comercial considerando que vienen a veces equipos de diferentes continentes para estar en un sitio en concreto unos días exponiendo sus marcas y servicios, que en muchos casos ya son muy conocidos. También es cuestionable el futuro de los cruceros turísticos que están en el punto de mira también por otras razones como su contaminación. Este tipo de viajes sufren ahora múltiples cancelaciones después de las incidencias ya vividas con algunas cuarentenas. También partidos de fútbol y festivales de música tienen que temer daños este año a causa de este pánico. Suiza ya ha anulado varios conciertos de artistas y el Gobierno quiere participar en los perjuicios que esto puede causar para sus empresas nacionales. Está en el aire también si tendrán lugar los Juegos Olimpícos de Japón. Teniendo en cuenta que el presupuesto oficial es de 12.600 millones de dólares, el coste de la suspensión sería de 343 millones de euros, estima John Plassard, Director Adjunto del gestor financiero suizo Mirabaud. “Sin lugar a dudas, la cancelación de la Olimpiada supondría dictar la sentencia de muerte al crecimiento japonés en 2020”.
LaLiga está preparada para tomar cualquier medida de seguridad
Los españoles por el momento parecen estar entre los más sensatos y eficaces en la gestión de la crisis del coronavirus. Se preparan con cuidado, pero parece que todavía no entran en pánico. Este fin de semana tiene lugar el clásico Madrid – Barcelona, un evento para el cual han venido periodistas y aficionados de todo el mundo. El impacto del fútbol español y las marcas conocidas en la India, EEUU o en América Latina es enorme. Por el momento no hay peligro de que no tenga lugar este domingo a las 21h en el Estadio Santiago Bernabéu en Madrid, aunque el presidente de LaLiga, Javier Tebas, asegura en una rueda de prensa con corresponsales que el fútbol español está preparado: “No pensamos que sea necesario, pero tenemos un plan alternativo por si acaso, y hay opciones de jugar a puerta cerrada o en otro momento, nunca se cancelará un partido”.
En el mundo de las ferias es diferente. Una feria una vez anulada no se repite, porque es demasiado complicada la organización y demasiado grande el riesgo financiero. El gran ganador de esta situación sin duda son las aseguradoras que venden ahora todo tipo de paquetes nuevos para eventos cancelados. Además, la propagación del virus de la corona está causando que cada vez más compañías como Nestlé restrinjan o prohíban los viajes de negocios durante un tiempo, lo que supone cancelaciones para hoteles y aerolíneas. Así el ya debilitado organismo alemán “Deutsche Flugsicherung (DFS)” ha anulado su participación en la ATM en Madrid, el congreso internacional sobre seguridad aérea. Oficialmente son medidas de seguridad, pero otros han seguido ya el ejemplo. Los organizadores por el momento mantienen la calma y cuentan con que no haya más anulaciones y el Congreso pueda seguir adelante como está planificado del 10 al 12 de marzo en la capital española. También “Arco”, la cita de las galerías de arte de todo el mundo, se desarrolla por el momento sin problemas en el recinto de Ifema de Madrid. Sin embargo, en Alemania los supermercados Aldi y Lidl ya se han preparado para aumentar el nivel de sus almacenes, por las crecientes compras de emergencia en los últimos días.