La inmediatez y la facilidad de acceso son algunas de las razones por las que los usuarios se decantan por la banca digital. Según un estudio de ADICAE, nueve de cada diez consumidores utilizan internet para consultar su saldo y movimientos bancarios, además de para realizar transferencias. No obstante, ese mismo estudio denota que las […]
NacionalDirigentes Digital
| 02 ene 2020
La inmediatez y la facilidad de acceso son algunas de las razones por las que los usuarios se decantan por la banca digital. Según un estudio de ADICAE, nueve de cada diez consumidores utilizan internet para consultar su saldo y movimientos bancarios, además de para realizar transferencias. No obstante, ese mismo estudio denota que las operaciones que atañen a ahorro e inversión se reducen “notablemente”.
A pesar de que internet en sentido amplio supone uno de los canales más importantes para los usuarios, las aplicaciones móviles en concreto no resultan todo lo atractivas que se podría esperar. Solo uno de cada cuatro usuarios tiene en su móvil la aplicación de su banco. Sí es cierto que entre esa proporción, la mitad accede a los servicios de dicha herramienta a diario o, al menos, una vez por semana.
El análisis, realizado con la colaboración del Ministerio de Sanidad y Consumo, también revela que la población de mayor edad encuentra más dificultades para utilizar este tipo de canales. Los menores de 45 años usan la banca digital en un porcentaje del 35%, mientras que entre los mayores de esa edad la cifra desciende al 23%. Además, la oficina bancaria sigue formando parte de la relación entre entidades y usuarios, dado que ocho de cada diez acuden a ellas ocasionalmente.
Otro de los datos que llaman la atención es el de conocimiento acerca de la existencia de las fintech. Apenas el 35% de los encuestados afirman conocerlas, mientras que el uso de las mismas es todavía más bajo. Twip y Fintonic son las más conocidas, pero otros nombres como N26, Etoro o bit2me “apenas eran conocidas por los encuestados”, se explica en el informe.
De ese modo, sí que hay conocimiento de aplicaciones de pago por el móvil (58%), además de Bizum(48%) o las tarjetas virtuales(35%). En lo que respecta a la tarjeta y al dinero en efectivo, el porcentaje de uso en ambos casos supera el 80%.
Según la asociación de consumidores y usuarios de banca, el estudio muestra que existe una “creciente brecha digital” entre los usuarios más jóvenes y los que no lo son tanto. De ese modo, se constata la “mayor reticencia o desconfianza con las nuevas tecnologías de los más mayores”. Para ADICAE “es urgente” realizar una alfabetización digital para que todos los usuarios estén en igualdad de condiciones ante la transformación de las finanzas personales.