El primer trimestre refleja a medias lo que CaixaBank puede llegar a generar gracias a su absorción de Bankia. Frente a los 90 millones de euros que generó en el mismo periodo en 2020, este año eleva sus resultados a 514 millones de euros, si se excluye el efecto contable de incorporar a la ya […]
NacionalDirigentes Digital
| 06 may 2021
El primer trimestre refleja a medias lo que CaixaBank puede llegar a generar gracias a su absorción de Bankia. Frente a los 90 millones de euros que generó en el mismo periodo en 2020, este año eleva sus resultados a 514 millones de euros, si se excluye el efecto contable de incorporar a la ya desaparecida entidad.
No obstante, si se contabiliza la incorporación de Bankia el resultado asciende a 4.786 millones de euros, si bien esta cifra no refleja datos clave del negocio. Con todo, hay que tener en cuenta que durante 2020 CaixaBank realizó cuantiosas provisiones para cubrir posibles aumentos de la morosidad.
El consejero delegado de CaixaBank, Gonzalo Gortázar, ha explicado que con la fusión con Bankia “consolidamos nuestro liderazgo en el sistema financiero, alcanzamos cuotas de mercado del entorno del 25% y los mejores ratios de solvencia, liquidez y calidad crediticia entre los grandes bancos en España. Ello nos está permitiendo apoyar decididamente a familias y empresas para salir de esta crisis y liderar la recuperación económica”.
Durante la rueda de prensa de presentación de resultados, Gortázar ha explicado que “los supervisores insisten en que la consolidación es absolutamente necesaria”, tanto por la reducción de la rentabilidad como por la situación de los tipos de interés. De hecho, el primer dirigente del banco cree que “los tipos van a estar siempre presionados a la baja, quizá no en negativo pero en el horizonte de planificación sí lo están”.
Así, para Gortázar “se ha desvirtuado la rentabilidad del negocio bancario tradicional”, teniendo en cuenta que los depósitos no generan ingresos para la banca. Por ello, la integración de Bankia responde a la necesidad de reducir costes y avanzar hacia una dinámica diferente, marcada por el envejecimiento de la población y las perspectivas reducidas de crecimiento económico.
Por otro lado, hay que añadir que la cuenta de resultados de CaixaBank no incluye los resultados generados por la actividad de Bankia en el periodo, ya que la operación se cerró a final de marzo, por lo que en ese sentido la fusión no ha tenido ningún impacto en las distintas líneas de actividad. En cuanto al balance, sí que se reflejan los pasivos y activos de Bankia, por lo que la cifra de activos supera los 663.000 millones de euros, mientras que la de clientes asciende a 21,1 millones.
Según aparece en los datos que CaixaBank remite a la CNMV, el margen de intereses se redujo en siete décimas, desde los 1.200 millones de euros hasta los 1.191 millones. Sin embargo, los ingresos core (los del puro negocio bancario) y el margen bruto se incrementaron un 1% y un 4% respectivamente.
Pese a estos resultados, Gortázar se muestra satisfecho de haber iniciado la reestructuración de la plantilla y su fusión con Bankia. “Somos conscientes de los enormes desafíos estructurales a los que se enfrenta el sector bancario, derivados fundamentalmente del proceso de digitalización de la economía y de los tipos de interés negativos. Por eso hemos querido anticiparnos, acometiendo esta integración que nos va a permitir mejorar sustancialmente nuestra posición competitiva”, comenta.