Desconexión digital en Navidad, clave para arrancar 2023 con una plantilla motivada

Para los trabajadores, períodos vacacionales como el que se avecina deberían servir de balón de oxígeno. Un espacio para recargar baterías. Sin embargo, esto no siempre es así. De hecho, según el ‘Informe sobre Desconexión Digital’ de Infojobs, en 2022, el 75% de los empleados españoles ha respondido llamadas o emails de trabajo fuera de su horario laboral y el 64% tampoco ha desconectado durante sus vacaciones.

Teniendo en cuenta que más del 40% de los empleados de nuestro país tiene cierta sensación de fatiga laboral y que el 54% no se siente motivado en su puesto actual, las primeras interesadas en promover que sus plantillas aprovechen su tiempo libre para descansar de sus obligaciones profesionales son las empresas.

Y no solo porque la desconexión digital sea un derecho laboral regulado por Ley que deben cumplir – en concreto, por el Estatuto de los Trabajadores, la Ley Orgánica 3/2018 de Protección de Datos Personales y, más recientemente, el Decreto-Ley de Trabajo a Distancia –, sino porque un trabajador descansado es un trabajador productivo, motivado y comprometido.

Mucho más que un derecho regulado por Ley

Cuando hablamos de desconexión digital aplicada al ámbito laboral, en pocas palabras, nos referimos al derecho que tienen todos los trabajadores de no conectarse a ningún dispositivo o software de empresa fuera de su horario laboral o durante festivos ni vacaciones. Por supuesto, este no conectarse incluye no responder llamadas de teléfono o mensajes de trabajo.

Entre los principales motivos para no desconectar, el mencionado informe destaca sentir la obligación de responder (47%), las exigencias del puesto de trabajo (38%) y tener asuntos pendientes de resolver (24%). Y los perfiles con más dificultades, aquellos con mayor responsabilidad – directivos y gerentes (62%) y mandos intermedios (41%). 

Lo que deben saber las empresas es que la desconexión digital favorece la salud mental de los trabajadores y mejora la conciliación de su vida familiar y profesional. Dos aspectos que deben cuidarse especialmente a raíz de la pandemia y la expansión del teletrabajo y que, de estar bien gestionados por parte de los empleadores, se traducen en un mayor rendimiento y un mejor Employer Branding. 

Una cuestión de cultura corporativa

Contar con una política interna que deje claro en qué términos se aplicará la desconexión digital en la empresa y qué medidas se implementarán para fomentarla es el primer paso para garantizar este derecho. Pero, además, muchos empleados mencionan como una de las acciones más deseadas, el establecer un control de horario más estricto que incluya las interrupciones fuera de la jornada laboral como horas extra. 

Prohibir las llamadas o el envío de mensajes fuera de un horario establecido es otra de las maneras en las que las empresas pueden favorecer la desconexión digital de sus trabajadores. A pesar de que estos no tienen la obligación de responder, el hecho de recibirlos puede hacerles sentir que sí deben hacerlo. En este mismo sentido, desde el departamento de RRHH pueden enviarse recordatorios para que los trabajadores desactiven sus notificaciones y activen los mensajes de respuesta automática cuando tengan festivo. 

También resulta importante organizar las tareas pendientes antes de que empiecen las vacaciones y proporcionar formación a la plantilla para concienciarle de la importancia de desconectar y desarrollar soft skills como el trabajo en equipo, la gestión del tiempo o saber delegar, entre otras. En este sentido, las plataformas de microlearning, que permiten aprender fácilmente dónde y cuándo quiera cada persona a partir de cápsulas de pocos minutos, pueden resultar especialmente útiles. 

Sea como sea, cualquier medida que se tome debe apoyarse siempre en una cultura corporativa que anteponga la eficiencia al presencialismo y, sobre todo, que sitúe a las personas y a su bienestar en el lugar que estos merecen, el centro de todas las estrategias.