En el último año, se ha hablado mucho sobre cómo la Inteligencia Artificial (IA) se ha colado en nuestras vidas, convirtiéndose en una pieza fundamental para muchas empresas y organizaciones que buscan aprovechar las oportunidades de transformación digital que esta tecnología les ofrece e, incluso, para el correcto desarrollo de nuestra sociedad, sumida en una […]
Dirigentes Digital
| 24 ago 2023
En el último año, se ha hablado mucho sobre cómo la Inteligencia Artificial (IA) se ha colado en nuestras vidas, convirtiéndose en una pieza fundamental para muchas empresas y organizaciones que buscan aprovechar las oportunidades de transformación digital que esta tecnología les ofrece e, incluso, para el correcto desarrollo de nuestra sociedad, sumida en una espiral de constante evolución y cambio debido a la aparición de nuevas tendencias tecnológicas.
Si enfocamos nuestra mirada al negocio, nos encontramos con que no hay grandes empresas dedicadas en exclusiva a la IA, sino que las tecnológicas de primer nivel solamente dedican una parte de sus recursos a esta actividad. Pese a ello, son cada vez más las empresas que definen nuevas aplicaciones en las que esté presente esta tecnología. Todas ellas tienen como objetivo optimizar sus recursos, lo que les empuja a desarrollar soluciones innovadoras que faciliten la experiencia de los usuarios.
Sin duda alguna, esta herramienta ha cambiado nuestra percepción del mundo, tal y como lo conocemos, creándonos una visión de productividad, eficiencia e innovación que nos anima a adentrarnos en el camino de la IA generativa. Pero, para llegar a ella, necesitamos profesionales que estén dispuestos a explorar todas sus posibilidades, desarrollar soluciones ágiles y validar, desde el punto de vista humano, los resultados que nos ofrecen estas tecnologías.
En este contexto, es importante destacar la gran brecha de talento digital existente en el mercado, una problemática que afecta a todas las áreas de negocio y que cada vez es más notable. La tecnología y la formación están avanzando a niveles muy distintos, y eso sumado a que, en los últimos años, la digitalización ha crecido a un ritmo exponencial, radica en una falta de talento.
Ante un escenario global tan cambiante, contamos con tres factores esenciales para impulsar la digitalización: la innovación en la educación, la seguridad en la red y el talento digital de la fuerza de trabajo. Justamente, este último cobra vital importancia si hablamos de transformación digital ya que la necesidad de las empresas de avanzar hacia el futuro está provocando una creciente demanda de perfiles digitales.
Según el último estudio de la Asociación Española para la Digitalización, España finalizó 2022 con más de 120.000 puestos de trabajo sin cubrir debido a la falta de perfiles especializados, lo que supone un incremento del 70% respecto al año anterior, y es una brecha que cada vez se hará más grande si no mitigamos su avance.
Desde el punto de vista europeo, los últimos datos de Eurostat revelan que el número de especialistas TIC ha crecido un 50% entre 2020 y 2021, una tasa ocho veces superior al crecimiento del empleo en la zona. Por su parte, España ha mejorado tres posiciones respecto al año anterior, siendo el séptimo país de la UE que más ha prosperado en el desarrollo tecnológico aplicado a procesos productivos.
Para que esta expansión siga aumentando, tenemos que aprovechar la oportunidad de extraer el máximo valor de las tecnologías de IA, de manera que los profesionales digitales que trabajen esta herramienta tengan la posibilidad de educarse en tecnologías emergentes y de vanguardia.
Cada día estamos más conectados y generamos una inmensa cantidad de datos, por lo que es importante que contemos con nuevos perfiles especializados en IA que se encarguen de recolectarlos, refinarlos e integrarlos en los sistemas. Una vez que consigamos esto, estaremos preparados para analizar grandes volúmenes de información y extraer conocimientos valiosos que nos ayudarán en la toma de decisiones, así como a identificar tendencias, comprender mejor a nuestros clientes y adaptarnos rápidamente a un entorno empresarial en constante evolución.
La escasez de talento en la industria tecnológica no debe ser un obstáculo insuperable, sino una oportunidad para aprovechar al máximo el potencial de la IA y los nuevos profesionales digitales. Al combinar la creatividad, el pensamiento crítico y la intuición humana con la capacidad de análisis y procesamiento de la IA, lograremos resultados excepcionales y cambiaremos positivamente la forma en que vivimos y trabajamos.
Esto implica abordar temas, como el uso responsable de datos, la equidad en las aplicaciones de la IA y la mitigación de posibles impactos negativos en la sociedad. En este sentido, es fundamental que las empresas y organizaciones trabajen en desarrollar soluciones de IA que sean seguras, confiables, transparentes y que permitan a los humanos centrarse en tareas de alto valor, aumentando sus capacidades.
Estamos ante el inicio de una nueva era, en el que la combinación de IA y talento digital humano permitirá a las empresas de todo el mundo lanzar productos y soluciones al mercado más rápidamente, generando código de manera automática mediante el uso de tecnologías avanzadas, como el aprendizaje profundo y el procesamiento de lenguaje natural, entre otras muchas. Por lo tanto, es tiempo de que fusionemos nuestra creatividad humana con interacciones inteligentes para generar una inteligencia aumentada que nos permita redefinir nuestras fronteras y transformar el mundo.