ESIC celebra por décimo octavo año consecutivo el mayor evento de managament, marketing y economía digital de España para profesionales, reuniendo así a algunos de los más altos cargos de empresas internacionales líderes en su sector. En una jornada en la que los líderes de empresas y organismos tan reconocidos (y dispares) como Tous, Astrazeneca, […]
Dirigentes Digital
| 22 nov 2021
ESIC celebra por décimo octavo año consecutivo el mayor evento de managament, marketing y economía digital de España para profesionales, reuniendo así a algunos de los más altos cargos de empresas internacionales líderes en su sector. En una jornada en la que los líderes de empresas y organismos tan reconocidos (y dispares) como Tous, Astrazeneca, Codorniú o Bimbo y otros internacionales como Wire UK, aportaron su punto de vista y experiencia para un momento crucial en el mundo empresarial coincidiendo todos en un aspecto que para muchos puede resultar llamativo: la Covid-19 ha sido toda una oportunidad para la reinvención de todos ellos. La pandemia tan solo ha acelerado un proceso ya finalizado.
Hoy Es Marketing (HEM), nombre que daba lugar al mayor encuentro que se celebra en España entre profesionales del mundo del marketing, también estuvo presente en streaming para tratar temas de los que ningún empresario, ni a mayor ni menor escala, debería no darse por aludido: la revolución digital en la newnormal es un hecho más que un informe de futuro.
A lo largo de las diferentes ponencias se podían escuchar términos cada vez más familiares como engagement, human expertise, desing thinking, steakholders y cómo no, el ya “respetado” managament. Pero, ¿hasta qué punto influye ello en la vida de una PYME? ¿Realmente un pequeño empresario tiene que estar al tanto de una digitalización que ya es un hecho? Indiscutiblemente.
Sin olvidar que hay que ser realista con una propuesta que se adapte a cada uno, hay algo que sí une a todos, indiscriminadamente: estar abiertos a un cambio y preparados para otros futuros, dando valor al factor humano como tal en apoyo de las nuevas tecnologías, y sin olvidar jamás un deber que tenemos todos para/con el planeta.
Hablemos de robots
Teniendo en cuenta que ya hay máquinas capaces de componer bandas sonoras o simplemente el hecho de que el campeón del mundo de ajedrez sea un robot, ¿qué nos lleva a pensar que los humanos somos insustituibles? Que no nos quepa la menor duda, porque, aunque estos híbridos ya sean una realidad dentro de la pirámide empresarial y siendo conscientes de que 85 millones de puestos de trabajo serán sustituidos por robots, hay algo en lo que jamás podrán competir con nosotros, los sentimientos, algo que Samuel Pimentel (Ackerman International) expone claramente: “hay que beneficiarse de esta revolución, pero no dejarnos invadir por ella”.
Es algo que a muchos se les escapa. Cuánta más tecnología, más talentos, más personas, se necesitan como bien expresó Luis Miguel Peña, de LLYC, sin olvidarnos jamás de que hay que aprovechar el momento de cambios, de continuos descubrimientos y avances también en el marketing porque, más allá de conseguir un objetivo de negocio, hay que activar la parte emocional del cliente para conseguir la afiliación que todas las empresas necesitan para ser diferentes al resto, creando así también una marca cultural.
Transformación a todos los niveles y para todos
Una vez claro que el cambio es una realidad, no podemos olvidar que además de la transformación digital hay que crear una marca también diferente a nivel cultural. Sostenibilidad y productividad deben aunarse en el nuevo concepto de empresa, como quedó claro Bimbo en su participación de la mano de su director general, José Luis Sáenz, pero sin dejar de lado la transformación que también los espacios han experimentado. La pandemia tan solo aceleró todo en lo que se llevaba trabajando durante años en concepto de digitalización. Accesibilidad, gestión del tiempo, profesionalidad, responsabilidad… ¿Y si tienes miedo? Estás de enhorabuena, tienes ante ti una oportunidad para crecer.
No importa cuál sea el perfil de tu empresa, porque al fin y al cabo, todos los negocios comparten retos muy similares. Las necesidades han cambiado y con ellas, los steakholders, pero jamás debes perder la esencia de tus cimientos, de tus principios como empresario. Puedes modificar aspectos para evolucionar, pero nunca tu entidad. La ominicanalidad como organización, trabajar con DATA en equipo, tener una cultura conjunta… son aspectos que se pueden reflejar tanto en la forma que se quiere llegar a un cliente (sea cual sea) como en esa necesidad de las empresas de eliminar la (anticuada) jerarquía mostrada ahora en espacios diáfanos para trabajar codo con codo.
Es el mundo el que está pidiendo a gritos esta evolución como en su día pudieron ser la calculadora o la lavadora. Las empresas se deben a las personas, a los equipos, y si para impulsarlas hay que valerse del “temido” Error 404, se debe aprovechar, para recuperarse y avanzar como exponía Rosa Tous: el aprendizaje a través del error.
Llamémoslo managment, revolución digital o mirar al futuro con optimismo y respeto hacia el mundo en el que vivimos. Marte aun nos queda muy lejos, cuidar y aprovechar el que tenemos es tarea de todos, y empezar por organismos que tienen más voz que otros, es una buen punto de salida.