Fruto de más de 40 años de investigación en laboratorio propio, Casmara ha desarrollado un revolucionario tratamiento antiedad con 360º system, sustentado en la necesidad de mantener la salud de la ecoflora mediante probióticos (lactobacillus y lactococcus), que potencian la defensa natural de la piel; y prebióticos que estimulan su actividad y crecimiento. Una combinación óptima, única y vanguardista que actúa en dos niveles: a nivel externo desde la ecoflora y, desde el interior, devolviendo a la piel sus niveles de juventud. Aunque está indicado para todo tipo de piel y edad, porque su acción principal es reforzar el sistema inmunológico cutáneo, se recomienda sobre todo entre 35 y 45 años, ya que previene, frena y mejora los primeros signos del envejecimiento. La acción de AgeDefense, por tanto, es integral y muy completa. Redensifica el cutis y acelera la renovación celular, reduciendo y previniendo las arrugas. Para ello, actúa sobre la piel como escudo protector frente a la polución, evitando la oxidación; aumenta la capacidad biosensora de la piel; estimula la síntesis de colágeno y mejora la cohesión de los queratinocitos, y logra una hidratación y nutrición óptimas. Sus resultados, muchos de ellos visibles desde la primera sesión: Frena, previene y mejora los signos ya visibles del envejecimiento; la piel del rostro se fortalece y equilibra, luciendo turgente, renovada y resplandeciente, además de lograr progresivamente la disminución de arrugas en cantidad y profundidad.
Protocolo Las esteticistas del Salón Noelia Jiménez, formadas por Casmara, desarrollan el facial AgeDefense en 6 fases, y siempre personalizado mediante envases monodosis: El primer paso es el preparado a base de Caviar de Lima, un novedoso peeling químico que elimina las células muertas y unifica el tono; el segundo paso es la fase defensiva, reestructurante e iluminadora con D-Protect y extracto de cedro japonés, que mejora la cohesión celular y pule el microrelieve; la tercera fase es antiedad , 360º detoxificante, redensificante y restauradora, a base de Pro&Pre biotic complex, jojoba y bee wax, pollu-block (antipolución) y dry oil complex; la cuarta fase es protectora y nutritiva, con skinadapt, que estimula la capacidad biosensora de la piel, dry oil, activedefense y aceite de macadamia, que nutre el rostro en profundidad. En la quinta fase se aplica la mascarilla antiedad 360º con tecnología ionizable, formulada también a base de prebióticos, rica en lactosa, ácido láctico, minerales y vitamina A y B. Permite utilizar la técnica de iontoféresis, logrando que los activos ionizables penetren a capas más profundas. Por último, en la sexta fase es la de antiedad global 360º, y combina de nuevo todos los activos utilizados en la tercera. El tratamiento, que contempla de cuatro a seis sesiones, es profesional y se disfruta exclusivamente en centros, con una periodicidad bianual recomendada.
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