El nuevo teléfono, que saldrá a la venta el próximo jueves en Estados Unidos y en un centenar de países en mayo, es una versión renovada del iPhone 5 lanzado en 2012, pero con la potencia del iPhone 6. "Es el teléfono de cuatro pulgadas más potente que hemos creado", afirmó durante una presentación en la sede de la empresa en la localidad californiana de Cupertino (EEUU) el vicepresidente de Apple, Greg Joswiak.
Además, Joswiak ha anunciado una actualización del sistema operativo del iPhone y el iPad, el IOS 9.3, que estará disponible a partir de este lunes y una nueva tableta iPad Pro más ligera y pequeña, de 9,7 pulgadas.
Apple registró un beneficio récord en la historia empresarial de EEUU tras el lanzamiento de los teléfonos con pantallas más grandes en 2014, pero afronta ahora una ralentización en las ventas, que podrían caer por primera vez este año desde el debut del iPhone en 2007.
En el último trimestre de 2015, las ventas del iPhone, que representan alrededor de dos terceras partes de sus ingresos, avanzaron al ritmo más lento de su historia hasta 74,77 millones de unidades.
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